Columna de Marco Antonio Ávila: En la senda correcta
Los resultados de la prueba Simce 2023 son buenas noticias para el sistema educativo. Si bien hay desafíos pendientes, los resultados nos permiten mirar con perspectiva los desafíos que tenemos como país. Debemos destacar el profundo valor institucional de la Agencia de la Calidad para la Educación, pues gracias al compromiso de sus trabajadores y de su Secretario Ejecutivo se logra cumplir con una promesa de la cartera de educación: contar con los resultados tempranamente en cada establecimiento del país. Ello no es menor, pues con estos datos, cada comunidad podrá trazar con tiempo y dedicación su camino de mejoramiento.
Asimismo, se comprueba que, tal como lo señalamos al inicio del gobierno, que las evaluaciones a gran escala son útiles y pertinentes toda vez que son herramientas para tomar decisiones, por ejemplo, sobre qué estrategias pedagógicas incorporar o fortalecer en las escuelas y no para instaurar categorizaciones que estimulen la competencia. En las últimas evaluaciones se prescindió de la categorizaron de establecimientos y esto no disminuyó la responsabilidad de los docentes.
En relación con los resultados, podemos afirmar que el camino que trazó el gobierno, a través de la Política de Reactivación Educativa, cuyos focos son la asistencia, la convivencia y el aprendizaje, fue una medida acertada. El aumento de 5 y 9 puntos en 4° básico, en lenguaje y matemática respectivamente, es una muestra clara de recuperación, acercándonos a los promedios prepandémicos. Contribuyó también, sin duda alguna, la extensión de la priorización curricular, medida valorada por directivos escolares y el profesorado.
Por último, los resultados muestran que los SLE, no sólo suben sus resultados en todas las asignaturas y niveles, sino que cierran las brechas producidas por la pandemia, e incluso a muchas veces la superan, especialmente aquellos que funcionan desde el año 2018. Mi llamado a todos quienes trabajamos y estamos comprometidos por mejorar la calidad de la educación es fortalecer la política de reactivación, redoblando las estrategias y recursos de apoyo, pues este último y no la presión sobre los establecimientos, es una de las claves del mejoramiento escolar.
Marco Antonio Ávila, profesor y exministro de Educación.