El pasado viernes 13, el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, prestó declaración en calidad de testigo en la causa donde se investiga cómo le llegaron perdigones en sus dos ojos al estudiante Gustavo Gatica, el 8 de noviembre pasado.

Según confirma el secretario de Estado, él fue invitado a entregar su testimonio, diligencia a la cual accedió.

El caso de Gatica conmocionó a la opinión pública porque, tras pasar por cirugías y tratamientos en la Clínica Santa María, el estudiante de sicología de 21 años perdió la visión en ambos ojos. Y según registros de audios y antecedentes de cercanos, el joven se encontraba en Plaza Baquedano a esa hora, participando de las manifestaciones sin haber estado involucrado en hechos delictivos.

Fuentes ligadas al caso explican que la declaración del ministro de Interior quedó en reserva, y que ni los querellantes del caso -la familia de Gatica representados por el exfiscal Carlos Gajardo- tienen acceso, por ahora. Sin embargo, su conocimiento de la implementación de los protocolos respecto al uso de armas antidisturbios en Carabineros, sería parte de lo consultado al ministro.

Las mismas fuentes agregan que el Ministerio Público estaba a la espera de tomar también declaración a un joven que, según imágenes, habría visto de cerca lo sucedido con Gatica. Esto porque Carabineros habría intentado sin éxito detenerlo instantes previos a la llegada de los balines en el rostro de Gatica. La fiscalía dio con la identificación del muchacho, quien podría convertirse un testigo clave en la causa.

Hace algunos días se hizo público que los persecutores a cargo -la fiscal Ximena Chong y Francisco Ledezma de la Centro Norte- circunscribieron en solo siete carabineros la investigación, de cuyas armas podrían haber salido las municiones.