Termina estatus de sobreexplotación del jurel: Chile podrá extraer en 2022 el doble que hace seis años

pesquera

Si en 2015 la cuota máxima bordeaba los 297.000 toneladas, para el próximo año se acerca a las 600.000 toneladas. A nivel global, se autorizó la extracción de 900.000 toneladas el próximo año.


Durante la década de los 90, Chile llegó a explotar del orden de 5 millones de toneladas de jurel al año. Gran parte se daba entre la V y la X Región. Y no existía ningún control sobre el recurso. No sólo -comentan en el sector- se explotaba sin límite por parte de nacionales, sino que además flotas extranjeras venían a hacerse suyo parte del botín.

Tal fue así que en el 2010 el jurel -nuestro principal recurso pesquero- prácticamente desapareció de las costas chilenas. De 5 millones de toneladas se comenzaron a extraer del orden de 200.000. Ahora, no obstante, la situación ha cambiado: el jurel salió de su estado de escasez.

“Nos da una tremenda satisfacción que el jurel haya dejado atrás su condición de sobreexplotación, porque lo que estamos viendo es la consecuencia directa de las prácticas de manejo sustentable que en los últimos años han aplicado los pesqueros industriales del sur”, destaca la presidenta de Asipes, Macarena Cepeda. “Después de varios años, el jurel chileno fue capaz de aumentar el tamaño de su población en el agua desde un estado agotado hasta una condición saludable, asegurando que estos peces puedan reproducirse, vivir, ser explotados en términos razonables, y ser conservados por las próximas generaciones. Esta es una excelente noticia para el mercado y los consumidores porque el abastecimiento de productos del mar del jurel chileno está asegurado para el futuro”, añade el Senior Fishery Manager South America de la entidad certificadora de pesquería sustentable MSC, Rodrigo Polanco.

Tal es así que si hace siete años, Chile estaba autorizado para extraer 297.000 toneladas de jurel, en 2021 la Organización Regional de Pesca del Pacífico Sur (ORP-PS), autorizó la extracción de 504.869. Y para 2022: 581.000 toneladas, un 96% más que en 2015.

Tomando medidas

En 2009 ante la amenaza de la desaparición del recurso, todos los países que operaban en esa pesquería generaron una organización para protegerla. Ese año se constituyó la Organización Regional de Pesca del Pacífico Sur (ORP-PS o SPRFMO por sus siglas en inglés), impulsada por Chile, Australia y Nueva Zelanda; y que hoy está compuesta por 15 miembros. Entre 2010 y 2020, empezó un período de recuperación del jurel. Se determinaron, entre otras cosas, cuotas modestas para ir repuntando, y se estableció una talla mínima para poder extraer. Todo, para avanzar en la recuperación de la biomasa y elevar la cantidad de jurel en al agua.

En 2015, se permitieron a nivel global 460 mil toneladas de jurel, y de ese total, un 64,5% se centró en Chile. De ahí en adelante, el dato se ha ido incrementando. Ya en 2021, se autorizó la extracción de 782.000 toneladas, y de ellas, 504.869 toneladas estaban situadas en el país.

“Hoy la pesquería está recuperada. Y en una muy buena situación”, dice un actor de la industria. “La recuperación del Jurel ha impactado en la creación de empleos en chile, y en la estabilidad de las cuotas de pesca, permitiendo a sus actores tanto industriales como artesanales planificar su desarrollo económico”, subraya el anterior presidente de la Comisión de la SPRFMO, Osvaldo Urrutia.

En octubre pasado, se reunió vía telemática el comité científico técnico de la ORP-PS. En la instancia se destacó el desempeño de la pesquería chilena.

“Se estima que la tendencia de la población va en aumento. Los indicios de mejora del stock impulsan el incremento”, señalaron. Aseguran que se visualiza mayor abundancia observada en la prospección acústica en la parte norte de Chile, mejores tasas de captura aparentes en todas las pesquerías para las que se dispone de datos, y el aumento de la edad promedio en las pesquerías chilenas.

Dado ese escenario, las proyecciones para 2022 mejoraron aún más. A nivel global se permitió la extracción de 900.000 toneladas -un 15% más que hace un año-, y 581.000 para Chile.

“Del total de jureles que se capturan en el océano Pacífico, Chile extrae siete de 10, lo que demuestra que la ORP sigue confiando en la responsabilidad con la que ha operado los pescadores industriales del sur en los últimos años. Eso nos ha permitido no sólo lograr que este recurso pasara de un estado de sobreexplotación a lograr una biomasa saludable, sino además obtener la valiosa certificación internacional de sostenibilidad MSC (Marine Stewardship Council)”, detalla Cepeda.

Hoy, sólo en Chile se consumen 8,9 kilos per capita de jurel, lo que representa el 59,3% del total de la ingesta nacional de pescados. Cuatro son las marcas locales que comercializan el producto: Único, de Camanchaca; Pacífico del Norte de Foodcorp; y Wirenbo y San José, de Orizon.

En 2015 se elaboraron 75 mil toneladas de congelados y conservas a base de jurel, mientras que el 2020 la cifra llegó a cerca de 245 mil toneladas de productos para consumo humano, lo que significa un aumento del 226%. La cifra es más de 3 veces lo que se producía en 2015.

Según el comité científico técnico del jurel, de seguir esta estrategia y manejo de la pesquería del jurel -y de no mediar cambios importantes ambientales-, se estima que para el año 2023 ya se podría superar el millón de toneladas como cuota biológicamente aceptada para el jurel en las aguas del Pacífico Sur.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.