Chuck E. Cheese, la cadena estadounidense de pizzas y entretenimiento familiar acaba de dar un giro que apunta directo al corazón (y la nostalgia) de sus fanáticos adultos.

Bajo el nombre Chuck’s Arcade, la empresa abrió en Estados Unidos diez nuevas salas de juegos diseñadas exclusivamente para mayores de edad, que mezclan clásicos retro como Donkey Kong, Ms. Pac-Man y Mortal Kombat con títulos modernos como Halo o simuladores de realidad virtual.

“Chuck’s Arcade es una carta de amor moderna a los juegos y a las personas que hicieron grande a Chuck E. Cheese”, aseguró la compañía en un comunicado.

El nuevo concepto busca ofrecer una experiencia que combine lo mejor del pasado con lo más atractivo del presente: desde videojuegos clásicos hasta premios y comida, en un ambiente que rinde tributo a la historia de la marca.

Por qué se abre Chuck’s Arcade

La decisión de apuntar al público adulto llega en medio de una transformación más amplia. Chuck E. Cheese se declaró en bancarrota durante la pandemia y desde entonces ha invertido más de US$ 350 millones de dólares en remodelar sus centros.

Según su CEO, David McKillips, la expansión a nuevos formatos era una evolución natural de la compañía.

“Chuck E. Cheese lleva décadas perfeccionando la experiencia de las salas de juego; lo llevamos en la sangre”, afirmó McKillips.

El director ejecutivo dijo que esta es una oportunidad para extender el legado de salas de juegos a nuevos formatos que atraigan tanto “a los fans de toda la vida como a una nueva generación” combinando “clásicos retro y experiencias de vanguardia”.

Las salas ya están funcionando en centros comerciales de ciudades como St. Petersburg (Florida), Tulsa (Oklahoma), El Paso (Texas), y St. Louis (Misuri), entre otras.

En Kansas City, incluso se abrió una versión con pizzería, que ofrece un menú completo y una selección de cerveza y vino.

Un arcade moderno pero nostálgico

Cada sala de Chuck’s Arcade tiene una estética única, decorada con murales y obras originales que repasan la historia de la marca, pero con un estilo renovado y pensado para el público adulto.

Las luces neón, las consolas retro y los nuevos simuladores son parte del ambiente para pasar varias horas jugando, comiendo o simplemente disfrutando con el resto.

Aunque el foco está en los videojuegos –desde clásicos ochenteros hasta tecnología de realidad virtual–, la experiencia se complementa con premios, servicio de comida y una selección de mercancía retro exclusiva.

Los visitantes pueden llevarse productos de merchandising con el logo clásico, juguetes coleccionables y dulces vintage, pensados directamente para quienes crecieron con la marca.