La jornada de jueves en el Mundial de Clubes 2025 se cerró con una especie de Copa Intercontinental, por el enfrentamiento de los últimos campeones de la Champions League, el Paris Saint-Germain, y la Copa Libertadores, el Botafogo. En esta pasada, la Conmebol venció a la UEFA. En el gran golpe del torneo, hasta la fecha, el equipo brasileño derrotó por 1-0 al multicampeón francés. Sorpresa total.

El favoritismo corría hacia la escuadra de Luis Enrique, que debutó aplastando al Atlético de Madrid con un rotundo 4-0. El Fogao también se estrenó como ganador, superando con varias dificultades al Seattle Sounders, el cuadro más débil del grupo B. Una victoria le permitía al PSG clasificar a los octavos de final.

Pese a la posibilidad de asegurar el ticket a la siguiente etapa, Luis Enrique optó por dosificar. Hizo cambios para cuidar a algunas de sus piezas importantes de cara al futuro del torneo. Marquinhos, Fabián Ruiz, Nuno Mendes y Joao Neves se fueron al banquillo. Eso sí, el DT recurrió a ellos durante el segundo tiempo porque el trámite del partido estaba cuesta arriba.

Los parisinos tomaron el control de las acciones desde el minuto uno. El georgiano Kvaratskhelia contó con un par de ocasiones durante los primeros cinco minutos. Era un aviso de lo que podía ser el partido: un Paris volcado en ataque y con posesión alta, ante un Botafogo replegado y aguardando por salir en contragolpe. La búsqueda, con balones largos, hacia el ex Napoli era reiterada en el PSG, porque generalmente recibía libre por la izquierda.

Tener el 75% de posesión en el primer tiempo no le sirvió al campeón de Europa. De a poco, el equipo carioca fue saliendo del sofocón y empezó a asomar la cabeza. Una acción de contraataque le permitió a los brasileños sorprender y abrir el marcador. En los 36′, un pase profundo entre los centrales va hacia Igor Jesus, quien termina sacando un disparo que se desvía en el ecuatoriano Pacho y descoloca a Donnarumma. Batacazo en Pasadena.

En la segunda mitad, los franceses intentaron de manera infructuosa la remontada. Luis Enrique metió cuatro cambios en una tanda, en los 55′, incluyendo a los titulares y a Barcola, para renovar la ofensiva. Pese a los movimientos en el tablero, era incapaz de entrar en la férrea estructura defensiva que montó el técnico Renato Paiva.

Botafogo tenía claro que, para hacer frente al mejor equipo de Europa, debía ponerse el overol y entrar en la refriega. Así lo hizo. Con un planteo más estratégico que estético, la escuadra de Río de Janeiro sacó la tarea y concretó el gran golpe de lo que va del Mundial de Clubes.

Apareció el Atlético

En el primer turno del grupo B, el Atlético de Madrid logró su primera victoria en el Mundial de Clubes. En Lumen Field, enfrentó al local Seattle Sounders y lo derrotó por 3-1. Si bien festejó, no pudo hacerlo de manera más holgada para neutralizar la goleada que recibió del PSG.

En los 11′, Pablo Barrios abrió el marcador, con un gran remate tras cesión atrás de Giuliano Simeone. En el complemento sucedieron los otros tantos. En los 47′, el belga Axel Witsel hizo el segundo con un cabezazo. La sorpresa se dio en los 50′, cuando el representante de la MLS descontó a través de Albert Rusnák. Después, en los 55′, una nueva aparición del canterano colchonero Pablo Barrios puso el 3-1 para la escuadra del Cholo Simeone.

De esta manera, Botafogo es el líder de la zona con seis puntos en dos partidos. PSG y Atlético quedan con tres, aunque los franceses tienen la ventaja de la diferencia de gol (+3 contra -2). Como queda de manifiesto, la victoria brasileña no le vino bien a los españoles.