Presidente de la Cámara de Comercio de Santiago: “La sostenibilidad financiera del sector no ha mejorado, se sigue deteriorando”

FOTO: VALENTINA MORA / LA TERCERA PETER HILL DOWD - EMPRESARIO - CAMARA DE COMERCIO DE SANTIAGO - RETRATOS

Peter Hill asegura que el sector está avanzando en una recuperación, pero que esta ha sido más lenta de lo esperado. Acusa que algunos socios les han informado sobre intentos de saqueos. Por ello, pide que se avance en la paz social.


Ventas muy por debajo de las que había en los tiempos prepandemia ha visto el comercio en las últimas semanas, a pesar del levantamiento de las cuarentenas. Según el presidente de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), hay espacio para avanzar en medidas sanitarias menos estrictas que, a la vez, permitan ayudar a la recuperación del sector, toda vez que, a su juicio, se ha demostrado que los protocolos sanitarios funcionan de manera correcta.

Además, pide que se avance en la paz social, pues sin ello es imposible pensar en una recuperación.

¿Ha mejorado la situación del comercio respecto a los meses más duros de las cuarentenas?

-Desde el punto de vista operacional, es un gran avance el estar implementando el plan paso a paso en sus distintas etapas y evidentemente es positivo para las empresas estar volviendo a la actividad. Pero si lo vemos solo desde un punto de vista financiero, no hay grandes cambios, desde un escenario de estar 100% cerrados, situación que genera grandes pérdidas, a la situación actual, que permite aminorar las pérdidas, pero partiendo de una base muy deteriorada, por lo que la situación de sostenibilidad financiera del sector no ha mejorado, y seguramente se sigue deteriorando.

Esperamos que esta apertura siga evolucionando para tener escenarios más positivos mientras avanzamos hacia fin de año, pero debemos tener claro que cualquier esfuerzo por superar la pandemia es totalmente inoficioso si el Estado no asegura el orden público.

¿Han observado problemas al respecto?

-Lamentablemente, en los últimos días empresas asociadas nos han informado sobre intentos de saqueo. Como sociedad debemos evitar, por todos los medios que se reinstale la violencia que tanto daño causó a las familias, las empresas y la economía.

¿Cómo están funcionando los protocolos de reapertura?

-Observamos una muy buena adopción de protocolos. Las empresas han tenido el tiempo de implementar, pese al deterioro en su situación financiera han hecho las inversiones necesarias y tenemos una visión positiva de cómo los chilenos hemos evolucionado y aprendido a tener mejores comportamientos cívicos de cara a enfrentar una pandemia. Insistimos que este es un esfuerzo de la sociedad en su conjunto. En lo que estamos en falta es en avanzar en la objetivación de los criterios de fiscalización. Aún observamos muchísimos casos de fiscalizaciones mediáticas, que avanzan en clausuras o multas por criterios arbitrarios, totalmente fuera del Formulario Único de Fiscalización impuesto por la misma autoridad.

¿Cómo han visto la reapertura de los malls?

-Avanzan paso a paso, muy bien, pero aún con niveles de actividad muy reducidos.

¿Hay temor de volver atrás con la situación sanitaria a nivel país, considerando lo que se ha visto, por ejemplo, en países europeos?

-Está dentro de lo posible, pero tenemos cierto optimismo, porque nosotros tenemos una perspectiva adelantada de lo ocurre en Europa y otros países, y creo que eso ha contribuido a que las autoridades, empresas y personas adopten más precauciones.

¿Qué ha pasado con los trabajadores que fueron enviados a Ley de Protección del Empleo? ¿Han sido reintegrados?

-Se avanza en reintegrarlos, pero al menos en el comercio no ha sido posible ir más rápido. En la medida que los horarios están restringidos y con los actuales aforos, las empresas no han sido capaces de reintegrar a todos sus trabajadores. Los actuales niveles de venta están, cuando más, en el rango del 25% al 45% de los niveles prepandemia. Hay que recordar que en nuestro sector, además, están las empresas del turismo y servicios afines (gastronomía especialmente), rubros que habían alcanzado niveles de servicio y madurez comparables a países desarrollados en algunos segmentos, y que ahora tardarán mucho tiempo en recuperarse.

¿Cómo está el negocio gastronómico?

-Muy dañado. Solo comparable a lo que ocurre en el turismo, donde, además, forman parte de su cadena de valor. Las ventas de restaurantes vienen cayendo a tasas entre el 80% y 90% en los últimos 5 meses, sin excepción. La situación es totalmente dramática.

Los grandes esfuerzos de los empresarios gastronómicos de reinventarse hacia el delivery, solo sirve como una manera de que el negocio no muera. Los niveles de actividad son muy bajos, y esperamos que las restricciones y limitaciones en este segmento avancen en permitir un nivel de actividad que sea más realista con la necesidad de sobrevivencia del sector. Entendemos que es un aspecto delicado en las variables de salud, pero se están haciendo las cosas muy bien y pensamos que se necesita un poco más de avance en las posibilidades de atención dentro de los locales. Hoy es mucho más crítica una situación de alta densidad de personas en el transporte público o en los centros de las ciudades y comunas atestadas de comercio ilegal que en el potencial al interior de los restaurantes.

¿Es sostenible el incremento que hemos visto en comercio electrónico?

-Hay mucho espacio por crecer, hoy día vemos que el comercio electrónico debe estar operando a unas 5 o 6 veces sobre los niveles pre pandemia. Antes, las ventas del comercio electrónico no representaban en total en el año más del 5% o 6% de las ventas totales, hoy están en torno al 20%.

Con la reapertura gradual del comercio físico esta relación se irá realineando, pero por ahora los aforos permitidos son tan bajos que el e-commerce sigue siendo una opción más viable para la gran mayoría de los consumidores.

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