Los dos
Son quienes están detrás del sello Elipse. Un matrimonio joven, arriesgado, de frente y que va con todo. Dos trabajadores de las formas, los mismos que fueron reconocidos con el premio Chile Diseño 2011 y que son un aporte concreto para el diseño de este país.
Desde chica que Ángeles Tuca supo hacer todos sus regalos a mano. Siempre sintió que el diseño le salía por los poros, "y lo comprendí cuando conocí la carrera de diseño en el Campus Lo Contador de la Católica", cuenta Ángeles, a lo que suma que "ese lugar fue mágico, realmente un espacio lleno de vida donde les dimos rienda suelta a la creatividad y la experimentación". Partió estudiando arte y de ahí se pasó a diseño, mantuvo las carreras en paralelo y le bastó llevar este ritmo por un año para entender cómo se complementan las dos carreras. "En diseño me incliné hacia el área industrial, donde tuve a los mejores profesores y ayudantes, entre ellos Carlos Hinrichsen, Neil Kerestegian, Alberto González, Óscar Huerta y muchos más".
La universidad le dio las herramientas para partir de intercambio y justo en ese momento conoció a Álex Blanch (de Raíz Diseño), quien entonces era director de la escuela Elisava en Barcelona, y a Ignasi Bonjoch, profesor y amigo con quien trabajó años después, ya titulada.
"Ignasi era discípulo de Dani Freixes, uno de los mejores interioristas catalanes del momento, y así fue como me empapé de experiencias que me llevaron hacia el interiorismo y el diseño de exhibiciones". Estando allá conoció a su marido y socio, el chileno Roberto Szirtes, con quien hoy comparte su familia y trabajo en pleno barrio Italia.
¿Qué es lo más importante del diseño de su marca Elipse?
Ángeles: Elipse partió siendo un estudio de diseño y evolucionó en una agencia, la cual presta varios servicios. Sin duda, el área de diseño de mobiliario ha cobrado mucha fuerza, para lo cual lanzaremos una nueva marca en abril, que agrupe las líneas de diseño que hemos estado lanzando y que se venden en la tienda que abrimos en abril pasado.
Roberto: La marca engloba una serie de actividades que abordamos como compañía; arriendo de mobiliario, lounge para eventos, producción de proyectos corporativos de mobiliario e interiorismo y hace ocho meses abrimos nuestra tienda en el barrio Italia en la que exhibimos mobiliario concebido en Elipse, diseñados con un carácter propio, resultado de un proceso de experimentación y búsqueda. En ello colaboramos estrechamente con Ángeles para conciliar diseño, industria, marketing y, lo más importante, producir mobiliario nacional con aspiración exportadora.
¿Qué significó ganarse el premio Chile Diseño 2011?
Á: Ahora estoy pasando por un momento importante en mi carrera, hemos cerrado este año con el premio Chile Diseño en categoría mobiliario, nuestro tercer reconocimiento en el área del diseño nacional desde que llegamos a Chile. Algo que nos motiva a seguir adelante y nos confirma que estamos haciendo un buen trabajo.
Queremos seguir desarrollando líneas de diseño para fomentar el consumo de productos
nacionales y contribuir con la identidad del diseño chileno. Por esta razón, es importante poder
darnos a conocer tanto dentro como fuera del país, para poder acceder a mercados más amplios,
con mayor demanda por el diseño. Creemos que éste puede ser el trampolín para dar el salto
que nos permita consolidarnos y poder prestar nuestros servicios en otras áreas en las que el diseño cumple un rol fundamental en la mejora de productos y servicios.
Estando en Barcelona, Ángeles Tuca pudo trabajar en tres montajes de exposiciones que se realizaron en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) y colaboró con el estudio Saeta en el montaje de una exhibición temática en el Forum Universal de las Culturas 2004. El año 2006 volvió a Chile y formó junto a su marido, Elipse, su estudio de diseño.
¿Cómo sienten que va encaminado el diseño nacional? R: Lo vemos con entusiasmo. Creemos que hay muchos talentos que quedan en el camino porque falta asociatividad con la industria, pensar en grande y salir a conquistar mercados con productos de exportación con materias primas nacionales, pero con alto valor en diseño y terminaciones.
Pensamos que todo este impulso y consolidación toma cada vez más el hecho de considerar el
diseño como una herramienta esencial para la diferenciación, la competitividad y la personalidad de un objeto o mobiliario. El gran desafío es llegar a tener una industria especializada, competitiva y potente en Chile.
Á: El diseño nacional ha evolucionado rápida y firmemente, lo vemos en las ferias, en cómo aumentan las propuestas y se ven mejores resultados. Cada vez somos más los que apostamos por el desarrollo de productos de diseño que nos representen, objetos que evoquen sensaciones, que comuniquen un mensaje, diseño con contenido. En Chile casi no hay historia del diseño de mobiliario, todos conocemos la silla Valdés pero, ¿después qué? Somos nosotros quienes tenemos que forjar esa identidad y promover el diseño chileno al resto del mundo. De esta forma ya no solo exportaremos materias primas en bruto, sino además, les daremos un valor agregado transformándolas en productos con diseño.
"La marca se gestó como referencia a la figura geométrica de la Elipse, que envuelve y rodea, cambiando según la perspectiva, y jugando con el movimiento dentro del plano", dice Roberto Szirtes.
¿Cuál ha sido la creación que te ha dado más alegría?
Á: Con la Línea Origami nos pusimos metas altas y las alcanzamos. El desafío en este diseño en particular fue conseguir un objeto práctico, que pudiera fabricarse en serie. Funcional en su uso y poético en su forma. Que permitiera ser apilado para optimizar los procesos de traslado
y almacenamiento y así facilitar su exportación. Además debía ser sustentable, utilizando
materias primas locales, reduciendo al mínimo el gasto energético y los desechos industriales,
aprovechando al máximo el material, simplificando el armado, y utilizando en este caso materiales
reciclables como el acero y el vidrio.
¿Cómo llegaron al barrio Italia?
Á: Llegamos al barrio buscando un lugar céntrico y con personalidad para establecer nuestro proyecto empresarial relacionado al diseño y producción de mobiliario. Influidos por la forma de vida que teníamos en Barcelona; nos pareció perfecto para establecernos. El barrio cuenta con patrimonio e historia, además de un carácter muy definido con los anticuarios de calle Caupolicán/Av. Italia. Poco a poco se fueron sumando más y más emprendimientos relacionados al diseño, la decoración, las artes, lo que sumado a la oferta gastronómica fue cambiando la fisonomía del entorno y trazando un verdadero hito dentro de Santiago.
Web: elipse3.cl
Lo Último
Lo más leído
2.
3.
4.
Contenido y experiencias todo el año🎁
Promo Día de la MadreDigital + LT Beneficios $3.990/mes por 6 meses SUSCRÍBETE