Este año, por esas cosas del calendario, casi todos los feriados caen en sábado o domingo, por lo que casi no hay fines de semana largos o esos agradables días que cortan la semana; de hecho, el próximo es recién el 27 de junio... Razón más que suficiente para aprovechar al máximo esta Semana Santa.

Independiente de la religión que se profese, y de las actividades que se armen asociadas a ella, estos días -por lo menos para mí- marcan el fin inevitable del verano y la entrada de lleno al invierno. En la playa, por lo general, amanece nublado y aunque por el no cambio de horario los días no se han acortado tan radicalmente, la calidad de la luz ya es otra, el sol no calienta tanto y dan ganas de que comience el frío, y ¡ojalá llueva!

Pensando en lo anterior ideamos una revista bien relajada, para leer, ver, sacar buenas ideas y estirar estos días.

Una casa que si bien no es de fin de semana, es un reflejo de sus dueños, que optaron por un camino distinto, privilegiando el cómo 'queremos vivir', sobre el cómo 'se debe vivir'.

También buscamos comida entretenida, fácil de preparar, porque la comida reúne y en torno a ella se pasa mucho mejor.

Y para cerrar, los huevitos, porque a todos nos gustan. Es divertido cuando uno junta gente y se habla de ellos, la cantidad de anécdotas y recuerdos que aparecen, de cómo los escondían, el estrés previo y la sorpresa.

Así es que disfruten este tradicional fin de semana y carguen pilas, porque va a ser de los pocos del 2011.