Paula 1239. Sábado 18 de noviembre de 2017. Edición aniversario 50 años.

Escribe sobre Elisa, una chilena que vive en Nueva York y entra en crisis con su pareja porque no quiere tener hijos. Al mismo tiempo, se fascina con la historia de Beth, una inglesa que sobrevivió, madre joven y sola, a la Segunda Guerra Mundial. Se demoró cinco años en articular esta novela de 380 páginas que explora la maternidad en la historia, en la posibilidad de no tener hijos y en los conflictos con la propia madre. Ella no ha vivido en Nueva York ni en Londres y tiene tres hijos (de 5, 4 y 1). Todo es observación de calle, investigación y ficción. La única persona que deja una huella clara en el libro es su abuela, Isabel Camus, quien vivió en el exilio tras el golpe militar. "Una mujer corajuda, de las que te dice que te limpies las lágrimas y sigas adelante, porque no hay tiempo que perder".

Para Florencia el proceso de escritura se unió al de la maternidad. Empezó porque le gustaba leer y probó en talleres literarios con Ana María Guiraldes y Pablo Azócar. El 2016 con su compinche Isabel Margarita Bustos –autora de Jeidi–, postularon al Fondo del Libro y la Lectura para Creación y ganaron. Fue el impulso para terminar su libro.

Situó su novela en Nueva York porque le parece una ciudad donde a nadie le importa mucho el otro y fue creando la historia que conforma el revés de la trama de la vida de Elisa: una editora a la que le llega el manuscrito con el diario de Beth, una joven londinense que resiste los bombardeos en la Batalla de Inglaterra y vive con la muerte en los talones. El contraste deslumbra, entre una generación entregada a cumplir sus sueños privados y otra que lucha por la vida colectiva. En ese juego vemos cómo la libertad de vivir también nos marca con heridas que no siempre queremos ver, y que podemos sanar.

Señas: Florencia Eluchans, 36 años, estudió Turismo y Marketing.

Proyecto emblemático: Esa vida que imaginamos, su primer libro.