Para Matilde Pérez este viaje era especial. Regresar a la Gran Manzana

con una muestra sólida y que recoge parte de sus ya muchos años de producción era el desafío. La muestra titulada Open Cube fue curada por Ramón Castillo, quien en su texto señala “Matilde vuelva a los EEUU en homenaje con condiciones en que tanto la artista como su obra se mantienen plenamente vigentes y se podrá apreciar la continuidad y los cambios en su obra y que nos muestran la evolución experimentada por su obra a lo largo del tiempo”.

El viaje fue organizado por Galería La Sala, quienes ya llevan 10 años trabajando en conjunto con Delta Airlines para crear muestras de artistas chilenos en galerías norteamericanas. Algunos de los últimos proyectos exhibidos fueron: Mario Toral con “Bodies and Spirals” el año pasado en Chicago; “Chilenos reciclan en el Bicentenario”, de Roberto Edwards, Francisca Valenzuela, María Elena Naveillán, Mariana Kaplun y Gonzalo Sánchez en Santa Mónica, Los Ángeles, el 2010, y el concurso para un mural en la OEA, el 2008, ganado por Rodrigo Cabezas con “Si la tierra hablara…”.

Para Alejandra Chellew, directora de Galería La Sala, llevar a Matilde Pérez a Nueva York era un desafío, por eso no dudó en buscar y conseguir el apoyo y financiamiento necesario a través de Entel, Aseguradora Magallanes, Indumotora One y Cono Sur. Gracias a ellos, la artista cinética chilena más importante que tiene el país regresó a Nueva York, lugar en el que no exponía hacía ya 28 años.

El embajador de Chile ante Naciones Unidas, Octavio Errázuriz, y Cristina Tortorelli de Errázuriz, recibieron en su casa a la artista y a parte de la comunidad de chilenos residentes. Luego, el día de la inauguración en la galería Smart Clothes, ubicada en el Lower East de Manhattan, fue homenajeada por José Miguel Insulza, secretario general de la Organización de Estados Americanos, quien viajó especialmente para la ocasión.