Tras una larga polémica donde se confirmó que Neymar había costado 40 millones de euros más de lo que el presidente del Barcelona había asegurado, el juez Pablo Ruz ha admitido la querella impuesta por Jordi Cases, quien acusa a Rosell de apropiación indebida por el caso del fichaje del delantero brasileño.

Sin embargo Ruz no cita al acusado a dar declaraciones, y considera que no hay urgencia o necesidad de hacerlo.

En un documento que entregó Ruz, explica que los antecedentes "podrían apuntar a una simulación contractual presuntamente llevada a cabo entre los firmantes de los acuerdos, que pudiera evidenciar una falta de correspondencia entre la causa y finalidad real de los compromisos y obligaciones económicas en aquellos documentados con el título nominal y apariencia formal de los contratos suscritos".

A raíz de esto, solicita a la FIFA que le otorgue los documentos necesarios para seguir con la tramitación, como también pidió a Neymar que entregue el contrato con su sociedad N&N, además  "expide comisión rogatoria a Brasil para que se aporten contratos de trabajo y traspasos del jugador", como asegura El Periodico de Cataluña.

Para recopilar más antecedentes, El Periódico aseguró que Ruz también solicitó al club que entregue el contrato que exponen el "pago de 7,9 millones de euros por los derechos de tres jugadores juveniles del Santos, así como los contatos que sustentan el pago de 9 millones de euros por jugar dos partidos contra el club brasileño".