El alto número de veraneantes que reciben los balnearios en época estival obliga a muchas municipalidades a regular los espacios públicos, incluyendo sus playas. Entre las distintas ordenanzas existentes, hay una que apunta directamente a las mascotas. Se trata de la de tenencia responsable de animales, que exige a cada dueño preocuparse por su animal y, además, les prohibe llevarlos a las playas aptas para el baño.

Si bien no se trata de una norma general, existen localidades como Santo Domingo o Zapallar donde que el incumplimiento de esta disposición se puede traducir en una multa de hasta 5 UTM (cerca de $ 224 mil), dependiendo del juzgado de policía local. Para que sea efectivo el cumplimiento de estas ordenanzas, existen inspectores municipales encargados de fiscalizar.

"Hay varios factores: el tema de la salud por las fecas de los animales, también por la confortabilidad. Porque, en el fondo, es un desagrado estar con un perro al lado saltando, ladrando o rascándose las pulgas", señaló el alcalde de Santo Domingo, Fernando Rodríguez (Ind), quién además comentó que "el problema es que no hay educación ni cultura del manejo responsable de mascotas en el país".

Por otro lado, el edil de Zapallar, Nicolás Cox (RN), indicó que “es una molestia porque no todos en la playa son  aficionados a tener mascota”. Además, comentó que es posible librarse de la infracción en caso de que la persona se lleve su mascota del lugar ante el aviso del inspector.

En ambas comunas la multa parte de una y llega hasta las 5 UTM, dependiendo del caso. En cambio, en Algarrobo esta infracción podría llegar a las 3 UTM, según indicó el alcalde del lugar, Jaime Gálvez (Ind). "Cuando pasa el verano, mucha gente deja a sus perros abandonados y quedan como perros vagos", añadió.

En Valparaíso, la ordenanza se aplica sólo en la época estival, a través de una concesión que postula la municipalidad a la Subsecretaría de Fuerzas Armadas, que les permite fiscalizar las playas sólo durante las vacaciones, indicó Jorge Castro (UDI), alcalde de la comuna. También añadió que las multas son alrededor de 3 UTM. Criticó que esto “es absurdo, porque después del verano no importa que entren 10 o 20  perros, o las fecas que puedan dejar en la playa”.

Situaciones distintas ocurren en Viña del Mar, La Serena y Pichilemu, que no prohiben el ingreso de animales a sus playas. “No tenemos restricción, mientras tengan los cuidados correspondientes con el animal, como el uso de correa y bozal”, indicó Roberto Jacob (PRSD), alcalde de La Serena.