Mi Placer: elBulli (1961-2011)
Hoy cierra elBulli. Por años el mejor restaurante del mundo (con todos los trofeos y estrellas que existen), baja el telón y el mundo se conmociona porque se acaba una etapa de la gastronomía. elBulli es sinónimo de Ferran Adrià, revolucionario de la cocina del siglo XXI y responsable de que la comida saltara a otro estado, a un concepto, que fuera más allá y construyera un lenguaje que malamente se ha llamado molecular. ¡Sáquense ya esa palabra de la cabeza!, pónganle laboratorio, uno que quiere experimentar ante todo con la meta de lograr sensaciones comestibles ultraestéticas, vanguardistas y esencialmente sorprendentes. Hoy se cierra la cocina más importante de todas por decisión de los dueños, y mañana se comienza a construir elBulli Foundation (2014), un lugar que recogerá a 25 personas que quieran cocinar sueños y a los que se les enseñará a pensar. Hacer escuela de revolucionarios, eso es devolver la mano a la sociedad según el mismo Adrià.
Entendiendo elBulli
Imagínense la de hitos y frases para el bronce que puede llegar a tener esta cocina. Ferran diciendo que elBulli lo 'trasciende', él mismo dando clases en Harvard o recibiendo el premio al Nº 1 de los restaurantes, haciendo que sentarse a su mesa sea el deseo más grande de cualquier gozador medianamente entendido en el tema.
1. Adrià es nombrado jefe de cocina de elBulli en el 84 y comienza a hacer lo que hoy entendemos como reconstrucción: platos de la nouvelle cuisine hechos de otra manera.
2. En el 87 escucha al cocinero francés Jackes Maximin decir "crear es no copiar", y su cocina da un vuelco, su cabeza explora otras formas y nace la fantástica comida que hoy crea.
3. Hasta el 2011 elBulli ha creado más de 1.500 platos en su cocina laboratorio. Sus menús son exclusivamente de degustación y constan de entre 35 y 38 bocados/experiencias que se disfrutan por al menos 4 horas y valen 250 euros por persona. Solo van 40 comensales a la vez.
4. Para que nos imaginemos bocados: caviar de melón en caldo de jamón ibérico (comienzos); chips de aceite de oliva; corteza de bacalao, codornices en escabeche de zanahoria, wanton de pétalos de rosa (2011).
La trivia
. Este es su logo y la foto que recibe en la entrada del sencillo restaurante de Cala Montjoi (Girona, Costa Brava, España). Adentro varias fotografías enmarcadas de bulldog francés. ¿Por qué? Eran los perros de los creadores de elBulli, una familia danesa que lo compra en el 61 como parte de un minigolf. Así se le decía a esa adorable raza y así quedó por siempre el nombre del restaurante.
Leer elBulli
Creo que el mejor libro para morir de amor por la creación gastronómica que hizo Adrià es sin duda "Comida para pensar, pensar sobre el comer", un libro grueso y con la portada de Ferran hecha por Matt Groening, el creador de Los Simpson. Pero esa es la anécdota, porque a través de mesas redondas, artículos de por ahí y allá, ensayos de nombres de mucho peso en varias disciplinas (como los coeditores Richard Hamilton y Vicente Todolí, ex director de la Tate Modern de Londres) se desmenuza y emociona en poner el universo Adrià como el arte que es, con su propio lenguaje, códigos y transformaciones. Fascinante.
También está empastado (en varios libros) el trabajo de Francesc Guillamet, el hombre que ha fotografiado todos los platos de elBulli y hecho de la fotografía gastronómica un verdadero arte. Además hay algunos con intentos de explicar recetas del mejor resto del mundo. Usted elija si quiere saber o mirar. Con los dos quedará encantado.
Ver elBulli
Su cocina, su gente, su arte y su juego. Hay documentales: Aromas de elBulli I y II y Un día en elBulli (en español), que se pueden bajar puesto que al menos los dos primeros se pasaron por la televisión en España. En marzo de este año se anunció la realización de la segunda película sobre el restaurante. La primera fue El Bulli, Cooking in Progress.
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