Cumpliendo su promesa, el Ministro Laurence Golborne, llegó a Copiapó para ser el padrino de matrimonio de Esteban Rojas Carrizo -uno de los 33 mineros que permanecieron por casi tres meses atrapados en la Mina San Esteban- y Jessica Yáñez, con quien Rojas se casó sólo por el civil hace 25 años.

Durante su encierro, Esteban prometió a su esposa -con quien tiene tres hijos- que si llegaba a salir con vida de la mina se casarían por la iglesia como ella siempre había soñado. Promesa que cumplió frente a un centenar de personas en la Iglesia "Nuestra señora de la Candelaria", frente a un centenar de personas.

Junto con destacar lo feliz del momento, el minero de 42 años señaló que ya pasado los meses "estamos haciendo una vida más normal. Estamos más tranquilos, siempre con un poco de recuerdos, pero estamos mejor. Estoy muy contento porque vino el ministro con su señora. Él me dijo que iba a ser mi padrino de bodas y está aquí, así que estoy contento por eso".

En relación a sus planes futuros explicó que está barajando si vuelve a trabajar "apatronado" o de manera particular, eso aún no lo sabe. Si seguirá dedicándose a la minería está por verse "no sé aún. No le puedo decir ni si ni no porque uno es minero y cuando no hay nada uno trabaja en lo que sea. Pero si tengo posibilidades de no hacerlo, no trabajaría", dijo.

Misma opinión tiene Ercilia Carrizo, madre de Esteban, quien expresó estar "contenta, muy feliz de ver que mi hijo está bien. Por lo mismo no quiero que vuelva a trabajar en mina, a no ser que sea afuera. Algo que no sea peligroso, porque adentro yo no quiero que esté más y mi marido tampoco".

La flamante esposa dijo estar "Feliz. He cumplido todos mis sueños, de estar con mis hijos, mis nietos y toda mi familia. Tanto mía como de mi esposo. Es algo muy hermoso. Se siente un orgullo, ya van a ser 25 años y esta es nuestra manera de celebrarlas y de mostrarle al mundo que el amor todo lo puede. Fue muy doloroso, pero al final logramos nuestra felicidad".

El ministro Laurence Golborne, señaló "yo me siento muy contento, porque siempre. dije que nuestro rol era sacarlos de ahí, devolverles su vida anterior y  que pudiesen desarrollar una vida lo más normal posible. Obviamente ente 33 personas hay distintas experiencias, cada uno de ellos tiene su propio mundo, pero en general están volviendo a sus vidas normales".

En cuanto a su promesa de ser padrino de matrimonio de esta pareja, afirmó que "para mi es un gusto estar hoy con Esteban y Jessica que se comprometieron a casarse cuando Esteban estaba abajo, y Jessica un día estando en la mina se me acerca y me dice: Ministro yo le quiero pedir algo. Nosotros nos queremos casar y nos gustaría que usted fuese nuestro padrino. Inmediatamente dije que si. Yo a ellos (los mineros) los he visto en varios momentos y hoy volver a reencontrarme con muchos de ellos, que también están invitados me tiene muy feliz".