SEÑOR DIRECTOR:

La subsecretaria del Patrimonio Cultural ha defendido públicamente la propuesta de reestructuración del CMN, dejando en el Consejo Nacional solamente la fijación de políticas, y descentralizando los dictámenes a las Direcciones Regionales del Servicio Nacional del Patrimonio para así acelerarlos.

Suena en principio loable, pero... es vox populi que una parte del Consejo y el personal del Servicio Nacional está constituido por un importante porcentaje de consejeros y funcionarios a los cuales el desarrollo económico les importa poco o nada. Muchos dictámenes absurdos y casi risibles -si no fuera para llorar- del CMN así lo demuestran. Sería interesante que los lectores sepan que, en promedio, cada una de las líneas de Metro se ha retrasado casi dos años tan solo por efectos de estos dictámenes, con un costo de oportunidad para los santiaguinos (más el costo de postergar la disminución en la congestión) que se puede evaluar en centenares o miles de millones de dólares.

Nuestras preguntas abiertas y públicas a la subsecretaria son dos:

1) ¿Qué propone usted para garantizar la idoneidad técnica de estas Direcciones Regionales, de manera que haya un razonable balance entre la protección del patrimonio y el desarrollo económico, para que sus dictámenes no conduzcan a realizar obras que detengan por años las inversiones con excavaciones absurdas que terminan la gran mayoría de las veces con toneladas de huesitos, pedazos de botella y loza quebrada, almacenados en bodegas ya que los museos se niegan a recibirlos?

2) ¿Estaría usted dispuesta, si se aprobara esta ley, a reconcursar todos los cargos técnicos (no solo los directivos) del nuevo Consejo y del Servicio Nacional del Patrimonio, con criterios transparentes, concursos públicos y administrados por el Servicio Civil para dar garantías amplias a todo el país?

Mario Waissbluth

Centro de Sistemas Públicos, U. de Chile

Rodrigo Azócar

Ex gerente general y ex presidente de Metro