Felipe Camiroaga es despedido en masivo homenaje en las calles y TVN

A las 7 de la mañana comenzó a apostarse la gente afuera del edificio corporativo de TVN. Con fotos, velas, banderas chilenas y pañuelos, terminaron reuniéndose más de cuatro mil personas, para seguir en una pantalla lo que sucedió adentro desde las 13.30 horas: el homenaje del canal público a Felipe Camiroaga, que fue transmitido en directo por la televisora y también por Mega y Canal 13. Las tres estaciones sumaron 37,4 puntos de rating, dando muestras del interés por la ceremonia.

Nueve halcones y peucos, unas 500 sillas de bambú, pequeñas flores blancas en grandes maceteros cerámicos, velones enmarcados en lámparas de estilo antiguo de hierro y, en el escenario, una gran cruz rodeada por telones rojos y amarillos. Ese fue el ambiente que Francisco Camiroaga, hermano del fallecido animador, diseñó para la liturgia en su memoria. El fue también el primero de la familia de la figura en llegar al lugar, pasadas las 11.30 horas, para supervisar los últimos detalles de la puesta en escena que había estado siendo preparada hasta tarde la noche anterior. En la labor lo ayudó el arquitecto y diseñador Hugo Grisanti, que colaboró con los detalles.

Una hora más tarde comenzó a llegar el resto de la familia Camiroaga Fernández: una de las hermanas, Paola Bontempi, seguida por el padre, Jorge Camiroaga, y por la otra hermana, Soledad Camiroaga. Aunque las invitaciones eran para 500 personas, en el patio de las comunicaciones del canal finalmente se congregaron más de mil, incluyendo a los funcionarios y rostros de la señal pública que se apostaron en los costados y balcones de la televisora. Entre las autoridades asistentes estuvieron el ministro secretario general de Gobierno, Andrés Chadwick; el presidente del Senado Guido Girardi; el ministro de Hacienda, Felipe Larraín; el ex Presidente Ricardo Lagos; el ministro del Consejo de la Cultura, Luciano Cruz Coke, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter y el ministro de Planificación, Joaquín Lavín. El mundo de la televisión, en tanto, estuvo representado por rostros como Cecilia Bolocco, Rafael Araneda, Angélica Castro, Tonka Tomicic y Martín Cárcamo, y los directores ejecutivos de Mega, Chilevisión y Canal 13, entre otros.

La ceremonia -que fue televisada con ocho cámaras dispuestas en el patio, apoyadas por móviles de prensa en el frontis del canal- partió con Julián Elfenbein, quien dio paso a las palabras del director ejecutivo del canal, Mauro Valdés. El ánfora con las cenizas de Camiroaga fue escoltada hasta el escenario por su hermano Francisco, su mano derecha y asistente Rosa Elena y por su amigo Daniel Sagües, quien, además, fue una de las personas que se dirigió al público. "Dicen que por su geografía los árboles de la isla de Juan Fernández tienen las raíces más grandes y firmes de todas. Esa debe ser una de las razones por la que a Felipe le encantaba tanto ir para allá. Creo que él creó raíces muy firmes con la gente que quiso", dijo el director de Animal nocturno.

Paola Bontempi (ver pág. 8), el periodista Gonzalo Ramírez y su mejor amigo, el director de TV Bibiano Castelló, fueron otros de los que también hablaron, visiblemente emocionados. "Todos los que estamos aquí sabíamos de tus virtudes, que son muchas, y también de tus defectos, que nunca ocultaste, cosa que te hace aun más grande", dijo Castelló, quien también habló "de los planes que tenías con tu querida y amada Fernanda Hansen".

La pareja del conductor estaba en primera fila, junto al padre de la figura televisiva. Soledad Camiroaga, en tanto, cuidaba a Santos, uno de los perros del animador, mientras sobre el escenario estaban sus halcones.

Multitudinario recorrido

Poco antes de terminar el acto, la primera en retirarse fue Vivi Kreutzberger, seguida por Hinzpeter. Por calle Francisco Puelma salieron sin dar declaraciones una muy emocionada Tomicic y Vicente Sabatini. "Fue una ceremonia emotiva, bien cuidada, pero tremendamente triste, porque es de no creer todavía que estemos en el funeral de Felipe Camiroaga", dijo Rafael Araneda, agregando que "el cariño de la gente fue hermoso, bonito, justo y necesario". El ministro Andrés Chadwick, en tanto, acotó que "estamos muy tristes. Fue una linda ceremonia, como se la merecía Felipe". Mientras que Marcela Vacarezza opinó que "es un día muy triste. Felipe era un persona querida y se siente su ausencia en televisión".

Una vez terminada la ceremonia, y antes de partir al cortejo fúnebre que llevaría los restos del conductor al Cementerio Parque del Recuerdo, Rosa Elena se dio el tiempo de pulir la placa que adornaba el canasto de rattán donde guardaron la urna con las cenizas del conductor.

La larga caravana que partió fue encabezada por la familia del conductor, seguida en un todoterreno por Gonzalo Ramírez y Fernanda Hansen, luego por un Mercedes Benz blanco con Bolocco a bordo y por una camioneta con la plana ejecutiva de TVN, encabezada por Mauro Valdés.

Las lágrimas, los gritos de "Fuerza", "jamás lo olvidaremos" y "viva Felipe" y las banderas con el rostro del fallecido animador marcaron el trayecto entre TVN y la llegada al Parque del Recuerdo. Miles de personas, en su mayoría mujeres mayores, acompañadas por niños de distintas edades y algunas escolares que lloraban abrazadas a sus amigas se vieron en las distintas calles por las que pasó el cortejo. El frontis del canal, la salida de la clínica Santa María, las afueras de la facultad de Derecho de la U. de Chile, el sector de Patronato y la pérgola de las flores (ver recuadro) fueron los focos donde se concentraron la mayor cantidad de personas. Algunos departamentos se veían adornados con banderas o fotografías y hasta los letreros luminosos del túnel San Cristóbal y la carretera Vespucio Norte cambiaron para reflejar la frase "hasta siempre, Felipe". La muchedumbre llegó al cementerio (ver pág. 8), donde seguían las muestras de emoción. Carabineros contabilizó que, en total, participaron más de 30 mil personas en el funeral.