Después de participar en los Panamericanos, Nicolás Jarry (69º) inició su temporada de cemento en el ATP 250 de Winston-Salem, el último torneo previo al Abierto de Estados Unidos. Y lo hizo con una dura derrota, a manos del veterano tenista español Pablo Andújar (71º), quien se impuso por 6-4 y 6-2, en una hora y 15 minutos.

La presentación del número dos nacional tuvo muchos puntos bajos, especialmente con el servicio, con el que apenas tuvo un 48% de primeros saques, lo que gatilló que el hispano, un especialista en arcilla de 33 años, lograra quebrarle en cinco oportunidades. En el primer set, Nico remontó dos veces las rupturas de su rival, pero no pudo con una tercera.

El segundo set fue uno de los parciales más bajos que se le ha visto al nieto de Jaime Fillol esta temporada. Numerosos errores no forzados con la derecha le facilitaron mucho la tarea a Andújar, que en ningún momento hizo algo fuera de lo común para ganar el partido. Simplemente, puso la pelota en juego y atacó solo cuando fue estrictamente necesario. Dos quiebres le bastaron para cerrar la victoria e instalarse en segunda ronda.

La derrota deja muchos aspectos preocupantes en el juego de Jarry, de cara al US Open, torneo al que llegará fuera del top 70, ya que no podrá defender 45 puntos obtenidos por los cuartos de final que alcanzó la temporada pasada.