Luego de Brasil y Colombia, Chile se posicionó en el tercer lugar de América Latina con las mejores condiciones para el desarrollo del ecosistema de startups e inversionistas, según el último Global Startup Ecosystem Index, que realiza la plataforma de investigación StartupBlink, que estudia a más de 1.000 ciudades y 100 países, con una base de datos de cerca de 200.000 startups.

De acuerdo al índice, nuestro país subió al puesto número 37 a nivel mundial, dos posiciones más que el 2024, con una tasa de crecimiento del ecosistema de 10.3%.

El índice evalúa cada ecosistema de startups a partir de tres grandes dimensiones:

Cantidad, que mide el nivel de actividad del ecosistema (número de startups, espacios de cowork, aceleradoras, etc.); Calidad, referente al impacto y éxito de las startups; y Entorno de Negocios, que analiza qué tan favorable es el entorno para el crecimiento de este tipo de empresas.

Sin embargo, el informe también realiza un análisis de nuestro país, indicando que los ecosistemas de startups de Chile tienen un potencial sin explotar. “Un desafío clave es la tendencia de las startups chilenas a apuntar a la mercado local relativamente pequeño en lugar de mercados internacionales. A fortalecer las empresas emergentes e impulsar el crecimiento económico, el país debería superar las limitaciones del tamaño del mercado centrándose en mercados regionales y globales”, devela el documento.

La importancia de Santiago

El Global Startup Ecosystem Index 2025 hace además un zoom en las ciudades que tienen las mejores condiciones para el ecosistema de emprendimiento. Y en esta línea, Santiago apareció como en el top 100 de las urbes con mejor desempeño del ecosistema de startups a nivel urbano, ocupando el puesto número 75 un crecimiento en esta ítem de 20,2% con respecto al año anterior.

Específicamente, el análisis de las ciudades mide temas como por ejemplo, la cantidad de actores de la industria (startups, inversionistas, hubs, etc.); el crecimiento del entorno de emprendimiento y la presencia de “unicornios” (empresas valorizadas en más de US$1.000 millones), startups apoyadas por aceleradoras como Y Combinator, entre otros elementos de impacto.

“La visión de Chile y Santiago, además de avanzadas iniciativas de promoción del gobierno chileno, servirán a los ecosistemas de startups durante los próximos años, siempre y cuando los responsables de las políticas no se distraigan del hecho de que los verdaderos héroes de la economía son sus empresarios, que deberían ser celebrados como impulsores del crecimiento económico futuro”, dice el informé, y agrega: “La de Chile es una historia de iniciativas innovadoras que se han estancado un poco y puede convertirse en un ejemplo si regresa al camino del crecimiento”.