Lo encomendado no sonaba para nada típico. Un reconocido empresario chileno necesitaba tener el lugar perfecto para poder hacer una invitación personalizada a sus visitas extranjeras, en vez de que estos alojaran en un hotel. ¿Qué necesitaba? Encontrar el lugar y contratar a expertos del tema. El primer punto lo resolvió comprándose el último piso del edificio donde él vive, ubicado en el barrio El Golf, con toda la vista al Club de Golf Los Leones. Listo, éste sería el lugar para crear su propio departamento-loft y poder recibir a sus visitas.

En el segundo punto, que habla de quienes ejecutaron la idea, entra a escena la oficina BIG Arquitectos (www.bigarq.com) de los socios Diego Balmaceda, Gonzalo Gálvez y Roberto Leyton y el destacado decorador Luis Fernando Moro, a quienes se les pidió, respectivamente, que no faltara ni sobrara nada y que el lugar se decorara por sí mismo.

El equipo de arquitectos actuó con claridad, “se comenzó eliminando el piso por completo, inclusive el techo. Lo bueno es que las características de construcción de este viejo edificio –del que se dejaron sólo los muros perimetrales estructurales– permitieron no tener límites en el diseño. Entonces, en sus 70 m2 originales se planteó un volumen central que separara el living del dormitorio. Este volumen contiene las zonas húmedas, es decir, cocina y baño”, cuenta el arquitecto Diego Balmaceda, a lo que agrega que “la cocina consiste en un mueble de acero inoxidable, en el que se encuentran ocultos encimeras y refrigeradores y donde sólo se ve lamáquina de café y elmicroondas. Lo entretenido es que fue pensada con puertas correderas, de manera que si no se está utilizando, se pueda tapar todo,mostrando un bloque liso. Esto hace que el ambiente del living cambie de acuerdo a la necesidad o utilización que se le dé”.

El decorador Luis Fernando Moro, trabajó con blancos y negros en el primer piso, bajo una propuesta minimalista representada por un gran sofá de dimensiones inusuales, para así convertir el espacio en un lugar de descanso. En el segundo piso, creó un ambientemás relajado para unir la terraza y el estar-comedor, utilizando madera como denominador común. Un concepto puro que se complementa con la propuesta arquitectónica.

Como se quiera; con las puertas abiertas o cerradas, arriba o abajo, privado o público, varias opciones dentro de un mismo concepto que semodificó hasta alcanzar los 110m2 con todo domotizado. Un camaleón en metros cuadrados que se adapta según la ocasión.