Pocos esperaban su aparición en las celebraciones de España campeón del mundo en su regreso a Madrid. Sólo los jugadores del plantel y su padre estaban al tanto: Alvaro del Bosque, hijo del entrenador español que padece Síndrome de Down, sorprendió a todos levantando la Copa del Mundo en el Palacio de La Moncloa, incluso ante la presencia del presidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.

Es que el entrenador le había prometido a Álvaro que celebraría con él si es que España resultaba campeón del mundo. Y no tuvo más remedio que cumplir.

Del Bosque reconoció que sufrió mucho cuando nació Álvaro hace 21 años y se enteró de su condición. Ahora, con el paso del tiempo, el entrenador mira atrás y dice "qué gilipollas fuimos", y añade que le ha cambiado la vida desde su nacimiento.

Alvaro es fanático del fútbol y se ha transformado en un talismán dentro del plantel español, tanto que los jugadores no dudaron en dar su autorización a Del Bosque para que Alvaro viajara con ellos en el bus descubierto que los paseó por la capital española.

Incluso, Del Bosque ha tenido que discutir con su hijo sus decisiones, pues él le ha recriminado algunas opciones que no le han gustado. Como cuando en un partido del Real Madrid dejó en la banca de suplentes a Iker Casillas o como cuando dejó fuera de la nómina para Sudáfrica 2010 al delantero Dani Guiza.

Su imagen alzando la Copa del Mundo en la llegada a Madrid o la foto del reencuentro con su padre, se han transformado en un ícono de la victoria española en Sudáfrica.