Nieta de jerarca franquista sale en defensa de tuitera que se burló de su abuelo

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Policías inspeccionan el cráter dejado por la bomba colocada por ETA y que mató al almirante Luis Carrero Blanco, en Madrid, en diciembre de 1973.

Lucía Carrero-Blanco dijo que era "desproporcionada y un absoluto disparate" la decisión de la fiscalía de pedir dos años y medio de cárcel y tres de libertad vigilada contra una estudiante de 21 años.




El almirante español Luis Carrero-Blanco era considerado el hombre que tomaría las riendas del régimen a la muerte de Francisco Franco. Eso después que Carrero-Blanco fuera nombrado por el mismo dictador, en junio de 1973, como su reemplazante en la presidencia del gobierno de España. Pero el 20 de diciembre de ese mismo año el grupo vasco ETA asesinó al almirante en un atentado de antología.

Una bomba colocada bajo la calle por donde iba a pasar el auto de Carrero-Blanco fue activada en el momento preciso. El vehículo se elevó 35 metros, salto por sobre un edificio y fue a caer en el patio interior de un convento. Así, cuando, la policía llegó al lugar de la explosión solo encontró un gran cráter en la calle y le tomó un buen rato antes de encontrar el auto y el cadáver de Carrero- Blanco.

Cuarenta y dos años después de su asesinato, una de sus nietas, Lucía Carrero-Blanco envió una carta al diario español El País en la que, de alguna manera, defiende a una Cassandra Vera, de 21 años, estudiante de Historia. La joven publicó en su cuenta de Twitter publicó una serie de chistes sobre el atentado del almirante Carrero Blanco que la fiscalía de la Audiencia Nacional considera un delito de "humillación a las víctimas" por lo que pidió dos años y medio de cárcel y otros tres de libertad vigilada para Vera.

Lucía Carrero-Blanco escribió en su misiva que no se siente "en absoluto" humillada por los tuits en cuestión, aunque sí lo calificó de "mal gusto" y que la pena que pide la fiscalía la consideró como "desproporcionada y un absoluto disparate". "Me asusta una sociedad en la que la libertad de expresión, por lamentable que sea, pueda acarrear penas de cárcel", destacó la mujer.

Dijo que los tuits de Cassandra Vera le "repugnan" y que le entristece que alguien pretenda burlarse de un asesinato. Pero ve la petición de cárcel como "atemorizadora". "Considero un error peligroso tratar de que la ciudadanía sea respetuosa a base de amenazas y sanciones desmedidas", insistió.

La causa contra la estudiante de Historia es por 13 tuits, subido entre el 29 de noviembre de 2013 y el 16 de enero de 2016. En el primero se leía: "ETA impulsó una política contra los coches oficiales combinada con un programa espacial". En otros se refiere al "viaje espacial" de Carrero-Blanco o recuerda el aniversario de su muerte con un "Feliz 20 de diciembre" junto a imágenes del atentado.

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