Carolina de Moras y su debut como conductora del matinal: "No titubearé en ningún minuto"

<P>La modelo, que mañana parte animando <I>Buenos días a todos</I>, en TVN, cuenta cómo Felipe Camiroaga la ha aconsejado y el aprendizaje de estos meses.</P>




A su primera entrevista como nueva conductora de Buenos días a todos -un papel que asume mañana-, Carolina de Moras (29) llega con una pulsera de dijes de protección contra las malas vibraciones y "cuidando las palabras", como señala. Han pasado 12 años desde que la modelo visitó por primera vez el programa, como invitada a paneles de discusión de "tema libre". En abril regresó con una sección de datos. En junio reemplazó por tres semanas a Katherine Salosny durante sus vacaciones. Y ahora, tras una salida de Salosny teñida de controversia, De Moras enfrenta su debut en la conducción en medio de un escenario marcado por las diferencias de la ex animadora y Felipe Camiroaga. "Lo estoy viviendo así y esta es mi realidad. Tampoco es terrible", afirma.

¿Qué cree que le falta como conductora?

Esa pregunta no la puedo responder, porque tengo que volver al estudio del matinal, agarrar una rutina y ahí ver, tapando mis carencias y dándome cuenta de todo lo que me falta, lo que hago bien y mal.

¿Cómo está puliendo esas carencias?

Estoy trabajando con Ricarte Soto en actualidad, un poco de historia, en entender bien este mundo. (La especialista en comunicación) Claudia Berger me ha aportado en cuanto a dicción, a gesticular y no aletear como un pollo. De repente estás hiperventilada y mueves los brazos, como adueñándote del espacio. Quiero trabajar duro, quiero estudiar mucho para hacerlo bien.

¿Cómo la ha ayudado Felipe Camiroaga?

Como ya tuvimos la experiencia del reemplazo, para mí fue como arrimarme a un gran árbol que me da sombrita y estoy tranquilita ahí abajo. Me alienta. Me dice: 'Carola, saca más voz para la próxima mención', 'Carola, párate derecha', o 'Carola, no te metas en este tema'. Me aconseja mucho: 'Carola, tienes que trabajar', 'Carola, tienes que leer'. Es una persona muy generosa en pantalla. Lo digo de verdad, de corazón, y no para quedar bien con nadie.

¿No ha sido demasiado rápido pasar de hacer una sección a ser conductora y ahora rostro del canal en la Teletón?

Ha sido una espiral bastante intensa, no podría negarlo, pero uno va avanzando como tus pies te lo vayan permitiendo, y mis piernas son lo suficientemente largas para subir mis grandes zancadas.

Canal 13 prepara un matinal con Tonka Tomicic y Martín Cárcamo. Es una apuesta fuerte y usted competirá con ellos.

Canal 13 va a hacer un muy buen matinal, pero tengo la seguridad del equipo y de que Buenos días a todos es el programa más visto de la televisión chilena como matinal.

¿No siente ni un poco de nervio a la competencia?

¡No! Con el equipo que tengo atrás, no titubearé en ningún minuto. No le veo el porqué a ponerse nervioso con ciertas situaciones que a la larga las voy a poder dominar.

Cuidando las palabras

En medio de tanta exposición que ha tenido últimamente, ¿ve como un comentario desafortunado la declaración de que usted representa a las dueñas de casa porque también va al supermercado?

No se entendió la idea. Yo vivo mi vida diariamente. No trabajo acá y tengo un arsenal de personas que me atienden. No soy solamente animadora, al contrario, primero que eso soy mamá, después soy mujer, amiga, hermana, pareja. Porque todo el mundo me dice: 'Es que tú eres modelo'. Pero no porque sea modelo dejo de ir al supermercado, a comprar pan, cocinar, lavar loza, cambiarle los pañales a mi guagua (su hija, de un año y cuatro meses).

¿Cree que ahora va a tener que cuidarse más en lo que dice y hace?

He aprendido mucho a cuidar las palabras y las oraciones que hago y expreso. Me estoy cuidando más. A mí me gusta decir lo que pienso, y harto, me gusta decir lo que siento y transmitirlo. Pero ha sido el desorden de esta situación el que hace que sea más cuidadosa con la información y no ser tan abierta.

¿Le incomodó toda la expectación que se armó durante su reemplazo en las vacaciones de Salosny?

Cuando me propusieron ese reemplazo fue como 'bueno, no tengo nada que perder'. Pregunté: '¿Están seguros de lo que están haciendo?'. 'Sí, señorita, estamos seguros', me dijeron. De ahí, que todas las críticas hayan sido bastante favorables, me sentí muy halagada, porque obviamente que uno no se puede sentir mal con todas esas críticas buenas.

¿Le incomodó que ya entonces se hablara de que iba a reemplazar definitivamente a Salosny?

Es que nunca pensé durante el reemplazo o en los meses posteriores que podía ser la reemplazante de Katherine Salosny. Porque no se habló del tema, tampoco me lo propusieron. Y lo otro, tú vas escuchando y dices: '¡Que inventan cosas!'.

¿Y eso no le incomodaba?

Pero cómo me iban a incomodar, si somos tantos millones de habitantes. Si me preocupara de todo lo que dicen...

¿Hubiese preferido que su llegada al programa se hubiese dado en un escenario diferente?

Todos los ingresos y salidas en el matinal han sido bastante comentados. Así es que no me esperaba menos en el caso mío con la Kathy. Obviamente iba a ser así. En la historia de todos los programas de televisión pasan estas cosas, cuando han cambiado a un animador, cuando se va uno, entra otro. Es algo que pasa en todas las empresas.

¿Siente alguna responsabilidad o culpa por la salida de Salosny?

¡Obviamente que no! Yo me tengo que hacer cargo de que me ofrecieron hacer el matinal 2011, cosa que me hace muy feliz, y eso no más.

Es decir, siente que no tuvo nada que ver en su salida.

¡Qué voy a tener que ver yo! No tengo el poder ni la capacidad. A mí me ofrecieron una opción, y la tomas o no la tomas.

¿Le ha dolido algo que se haya dicho en este período?

No he leído ni he escuchado nada, porque no tengo tiempo. No puedo decir nada. No voy a responder a nombre de la Kathy. No voy a responder a nombre de Felipe. No voy a responder a nombre de nadie.

¿Hasta dónde quiere llegar en televisión?

Soy súper mala para proyectarme. Ahora estoy concentrada en hacerlo bien en Buenos días a todos. Soy súper aterrizada, bien del día a día. No digo "próximamente", para nada.

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