Emprendimiento

Quince años moviendo el tablero: la metamorfosis de Start-Up Chile

El aniversario de esta entidad de Corfo, llega con indicadores que permiten observar cómo ha evolucionado en volumen, desempeño y proyección global. No es solo una historia de startups, sino de un cambio en la forma en que Chile se relaciona con la innovación.

Quince años moviendo el tablero: la metamorfosis de Start-Up Chile

“Cuando el mundo aún tenía abiertas las heridas del impacto financiero que produjo la Crisis Subprime del 2008, al sur del mundo sucedió un hecho que también marcaría un cambio de ciclo en lo psicológico y económico.

A fines de febrero de 2010 uno de los terremotos más grandes que ha conocido la humanidad sacude el centro-sur de Chile. Entre cambio de gobierno y década, la palabra “reconstrucción” se tomaba los titulares de los medios y las conversaciones de las entidades públicas y privadas. Justo un año antes, Nicolás Shea, actual CEO de Cumplo estaba en la U. de Stanford, la cuna de la startups tecnológicas. “Era difícil quedarse emprendiendo en Estados Unidos luego de finalizado los estudios en California. Y veía como muchos compañeros de diversos países sentían la angustia de no poder hacer lo mismo. Era una tontera, yo les hubiese pagado y regalado visas para que se fueran a emprender a Chile”, comenta Shea.

Tres días antes del terremoto, el futuro ministro de Economía y Reconstrucción de Sebastián Piñera, Juan Andrés Fontaine, llamó a Shea, para ofrecerle liderar un nuevo equipo de innovación. Pero el emprendedor aún estaba entre decidir por quedarse en Estados Unidos o volver a Chile. El 27 de febrero, dos sobrinos de Shea perdieron la vida con el sismo y tsunami, lo que hizo que se replanteara varias cosas. Una de ellas, volver al país. Junto a Fontaine comenzaron a masticar la idea de crear alguna entidad que atrajera talentos emprendedores desde el extranjero, lo que más adelante se transformaría en Start-Up Chile.

Quince años después, esta entidad dependiente de Corfo, ha celebrado de varias formas su simbólica edad. Pero volvamos al principio de la década pasada, cuando se comenzó a diseñar Start-Up Chile, el plan tenía dos objetivos: por un lado, generar un cambio sociocultural en los emprendedores chilenos para potenciar una mentalidad más innovadora y con foco en problemas globales y no sólo locales, y por otro lado, fomentar el desarrollo del ecosistema local, muy incipiente en esa época.

Para esto, se les ofreció a las startups co-financiamiento equity free a los emprendedores y un proceso de softlanding que incluía la entrega de una visa de trabajo. Además, los emprendedores pudieron acceder a conexiones con el mercado local, mentorías y espacios de encuentro para trabajar rodeado de sus pares emprendedores.

En agosto de ese año comenzó el proyecto piloto. Los primeros emprendedores en llegar fueron Amit Aharoni y Nicolás Meunier, desde la Universidad de Stanford, para desarrollar y lanzar su startup, CruiseWise. En total llegaron 24 proyectos de Estados Unidos, Canadá, Costa Rica, Argentina, Uruguay, China, Irlanda, Francia, Alemania, España, Portugal y Reino Unido.

La historia avanzó rápido. En 2011 se lanzó oficialmente el programa Seed. En 2012, The Economist bautizó al fenómeno como “Chilecon Valley”. En 2013 se superaron los 1.000 emprendedores. En 2015 nació The S Factory, el primer programa con foco en mujeres. En 2018 surgió Huella para startups de triple impacto y, ya para 2020, la oferta completa se reorganizó en Build, Ignite y Growth (BIG), un sistema que permitió acompañar desde la idea inicial hasta la expansión internacional.

2021 fue un año importante. Por primera vez una startup del programa, NotCo, se convirtió en unicornio (empresas valorizadas por más de US$1.000 millones). Pocos meses después, también lo hizo Betterfly. Con esto se llega a la suma actual de 4 unicornios en el portafolio de Start-Up Chile (incluyendo a Meliuz de Brasil y Cabify de España).

Un año después, la Bolsa de Santiago y Corfo, a través de Start-Up Chile, lanzaron ScaleX Santiago Venture Exchange, un mercado de financiamiento para startups de Chile y Latam. Y en ese mismo año, Start-Up Chile se convirtió en caso de estudio de Harvard Business School (HBS).

En números…

La encuesta Annual Alumni Passport 2024 muestra que Start-Up Chile ha apoyado a más de 3.000 startups y 6.000 fundadores desde su creación. La tasa de supervivencia del portafolio alcanza el 63,8%, mientras que un 25% de las startups reporta haber pivotado su modelo de negocios, demostrando altos niveles de adaptabilidad.

En términos de retención, el 68,7% de las startups extranjeras cumple al menos uno de los criterios de permanencia en Chile —mantener headquarter, generar ventas en el país o emplear talento local—, reforzando la capacidad del programa para atraer y anclar proyectos internacionales.

La valorización total del portafolio llegó a US$6,5 mil millones, equivalentes a 68 veces la inversión pública acumulada hasta 2023. El portafolio incluye 4 unicornios (NotCo, Betterfly, Meliuz y Cabify), 1 centauro (valorización de US$100 millones o más), Buk y 64 ponies (US$10 millones o más), con un crecimiento del 29,2% en esta última categoría respecto a 2021. Entre 2019 y 2021, el valor del portafolio se duplicó, reflejando el impacto del programa en la creación de empresas de alto valor.

En levantamiento de capital, las startups han conseguido US$1,88 mil millones de inversión privada, equivalente a 19,8 veces lo invertido por Start-Up Chile. Si se suma capital público y privado, el total asciende a US$2,15 mil millones.

Sin embargo, persiste una brecha de género: las startups lideradas por mujeres levantan solo el 2,9% del capital privado, aunque generan el 64,8% de las ventas globales. Además, un 40% de las startups BIG incorporó inversionistas ángeles en su última ronda, y los instrumentos predominantes fueron SAFE (52,6%), equity (22,8%) y convertible notes (21,1%).

En cuanto a ventas, el portafolio acumula US$3,5 billones a nivel global (37,6 veces la inversión pública) y US$716 millones en Chile. El 86,9% opera bajo modelos B2B, evidenciando una clara orientación hacia clientes empresariales. Las startups apoyadas han generado 36.796 empleos y un 34,8% se ha internacionalizado, con presencia en 32 mercados, principalmente Estados Unidos, Perú, México, Colombia y Argentina. A la fecha, se registran 90 exits, un aumento del 12,5% respecto a 2021, y la contribución en impuestos asciende a US$136 millones, equivalentes a 1,4 veces la inversión pública total, mostrando un retorno fiscal directo positivo.

Javiera Araneda, gerenta de Startup Chile.

Javiera Araneda, la actual gerenta de Start-Up Chile analiza estas cifras y lo logrado hasta ahora. “Miramos con mucho orgullo los 15 años que ha cumplido Start-Up Chile, desde su creación como la primera aceleradora pública del mundo, entregando apoyo a más de tres mil emprendedores tecnológicos provenientes de 98 países. Lo que nació como un loco experimento, hoy se ha convertido en una política pública significativa y transversal, que ha contribuido al posicionamiento de Chile como uno de los principales polos de innovación en la región”, concluye Araneda.

Más sobre:Hub EmprendeEmprendimiento

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.

⚡Black Sale: información real + ventajas exclusivas

Digital + LT Beneficios$1.990/mes SUSCRÍBETE