Una casa clásica y tradicional si tuviéramos que encasillarla en algún estilo, pero es la riqueza de sus espacios, y la calidad de sus muebles y obras de arte, lo que demuestra una vez más que lo bueno no pasa nunca de moda. Fibras de calidad, muebles de buena factura y piezas de arte que acentúan el carácter de cada ambiente y pueden acompañar a una familia por años, de esto se trata esta casa, proyectada por el arquitecto Felipe Mekis (felipemekisarquitectos.cl) hace más de 10 años.

El programa estuvo muy determinado por el terreno en donde se emplaza, una gran pendiente que significó para Felipe un gran desafío. Los desniveles dieron la posibilidad de explorar nuevas tipologías espaciales. “Tengo un estilo más bien clásico y engloba lo mediterráneo, francés, inglés, y el estilo provenzal, que es lo que más ha marcado el transcurso de mi carrera, porque es libre y de líneas limpias”, explica Felipe. Por lo mismo el proyecto era una dualidad que lo hacía en su concepción más visual y estética una propuesta clásica de aire provenzal, y en su espacialidad interior y distribución de los ambientes, una casa muy dinámica, que supo aprovechar las condiciones existentes del lugar. “Adquirieron un terreno con mucha pendiente, y principalmente lo que ellos buscaban era perseguir la vista maravillosa hacia la cordillera. Estaba más bien orientado al norte, por lo que la tarea era grande”, Agrega.

Buscaban un lugar que los identificara, y con el que tuvieran cercanía, donde los tamaños y espacios fueran proporcionados, y que sintieran empatía. El resultado fue una casa hecha de forma tal que no presume sus dimensiones, y la distribución del nivel de abajo en donde hay cuatro dormitorios es algo imperceptible desde la fachada, mientras que en el piso de arriba funcionan la pieza principal, living comedor, cocina y terrazas a nivel con la parte superior del cerro, pues la entrada es desde abajo.