Fucsia, amarillo y morado son algunos de los colores que se relacionan sobre un telón negro confeccionado especialmente para resaltar los productos, foco esencial de la nueva imagen de Ópticas Place Vendôme, que a través de un lenguaje claro busca llegar directamente a su público objetivo. "El diseño consiste en una tienda limpia, que permita simplificar el proceso de compra con la idea de que el producto sea el protagonista absoluto. Además de ofrecer una alternativa diferente para cada estilo de vida", aclara Cristóbal Hurtado, gerente general de OPV.

La oficina de arquitectura Space Planning fue la encargada de llevar a cabo este concepto con la utilización de materiales nobles, como la madera de encina, con la que fueron configurando una ambientacón con acentos que dinamizan la típica estética de una óptica. La forma en que se dispusieron los anteojos y los módulos de colores independientes son un claro ejemplo de ello. "Como un eje ordenador y a la vez conductor del espacio, nace la mesa/bar de anteojos, materializado por medio de un mesón largo y sinuoso que tiene la particularidad de exhibir el producto de manera más cercana. Es aquí donde se unifica la diversidad de clientes -jóvenes, adultos y niños- a través de sus distintas alturas. Como polo de atracción se diseñó la mesa focal o mesa 'seasonal' que da la bienvenida a la tienda, además de los cubos de colores como flores pixeladas dispuestos para la exhibición de los productos infantiles, que a la vez son el remate de este eje ordenador", aclara Patricio Vásquez, arquitecto de Space Planning.

La simpleza del trabajo arquitectónico deja en claro la intención de sus creadores por demostrar que finalmente la tienda es solamente un marco austero que potencia al máximo su producto.