En el undécimo día de la guerra entre Israel e Irán, las autoridades israelíes organizaron una conferencia de prensa virtual este lunes para los países hispanohablantes, donde se refirieron a la Operación León Ascendente, la ofensiva militar que el país de mayoría hebrea ejecuta sobre la República Islámica y que mantiene al mundo en vilo. “Nuestro ataque no fue un acto de agresión, fue un acto de supervivencia”, dijo a los periodistas Roni Kaplan, vocero uruguayo de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

El portavoz y capitán militar también afirmó que la actual operación militar contra Irán representa la última oportunidad de frenar lo que calificó como una “amenaza existencial” para Israel. Según explicó, el régimen de Teherán estaba a punto de completar el desarrollo necesario para producir 15 bombas nucleares, lo que no solo pondría en riesgo a Israel, sino también a Occidente y a gran parte del mundo árabe.

“Un Irán con armas nucleares no cambiaría las reglas del juego, sino que terminaría el juego directamente”, advirtió.

Kaplan también aseguró que Israel agotó las instancias diplomáticas y advirtió durante más de una década a la comunidad internacional sobre el programa nuclear iraní. “A pesar de ello, Irán siguió su programa nuclear. Le dimos al mundo la oportunidad de desescalar también la situación, y encontrar una solución diplomática, que siempre es mejor. Sin embargo, llegamos a un punto sin retorno”, justificó el también director ejecutivo de la empresa Conexión Israel.

Además, el portavoz vinculó directamente el apoyo de Irán a grupos como Hamás, Hezbolá y los hutíes de Yemen, y dijo que, a su juicio, la masacre del 7 de octubre de 2023 “no habría sido posible sin el financiamiento, entrenamiento y transferencia de tecnología” desde Teherán. En ese sentido, señaló que Irán actúa a través de una “coalición de proxys” que buscan desestabilizar la región.

Respecto a la amenaza balística de Teherán, Kaplan detalló que más del 50% del arsenal de misiles iraníes ha sido destruido. “Todo esto es nuestra respuesta a la amenaza existencial e inminente que Irán representa para Israel. Nuestro ataque hace 11 días no fue un acto de agresión, fue un acto de supervivencia. Y la cultura es todo lo que un pueblo hace, crea y transforma para satisfacer sus necesidades, empezando por la supervivencia”, defendió.

Finalmente, Kaplan afirmó que Irán no ha ocultado su intención de destruir Israel y que la amenaza sería mucho mayor si llegara a contar con armamento nuclear. “No vamos a permitir que el régimen más peligroso del mundo tenga las armas más peligrosas del mundo”, sentenció.

Y aseguró: “Vamos a continuar degradando el programa nuclear iraní, atacando más laboratorios, más investigadores, más facilidades o sitios de este tipo de plantas, golpeando sus arsenales de misiles balísticos y eliminando su capacidad de continuar con la producción de estos misiles”.

Además del portavoz, durante la conferencia también emitieron declaraciones la embajadora de Israel en México, Einat Kranz Neiger; y Gabriel Ben-Tasgal, periodista argentino especializado en defensa militar de Medio Oriente. Este último, explicó que el conflicto actual marca el colapso del eje chiita liderado por Irán y sus aliados, y que Israel está atacando directamente la “cabeza del pulpo”, o sea, al régimen iraní.

También advirtió que Irán ha sido un aliado clave de Venezuela. “Desde los años 80, el chiismo se ha expandido especialmente en América Latina, de forma especialmente preocupante a través de Venezuela”, afirmó, asegurando que el país caribeño les ha facilitado uranio, apoyo logístico y político desde el gobierno del exmandatario Hugo Chávez.

Bajas de civiles en la región

Al mediodía de este lunes -y en paralelo a la conferencia virtual- Irán emprendió un ataque a la base aérea estadounidense de Al Udeid, en Qatar, sobre la cual “no hay informes de víctimas en este momento”, según dijo un funcionario estadounidense. Al respecto, las defensas aéreas de Qatar “interceptaron con éxito” el ataque con misiles contra la base aérea, afirmó el Ministerio de Defensa de Qatar.

Los ataques israelíes contra Irán han matado al menos a 950 personas y herido a otras 3.450, informó este lunes el grupo Activistas de Derechos Humanos en Irán, con sede en Washington. Mientras que, el Ministerio de Salud gazatí confirmó que el número de muertos en la Franja ha aumentado a 55.998, la mayoría de los cuales son niños y mujeres. En paralelo, Israel bombardeó partes del sur de Líbano, aunque no hubo informes inmediatos sobre las víctimas, reportó Al Jazeera en la misma jornada.

Al inicio de la conferencia, la embajadora israelí en México declaró que “Israel no está en contra del pueblo de Irán y no ataca objetivos civiles”. Por ello, La Tercera contrapreguntó a los expositores de la conferencia cómo Israel justifica entonces las bajas civiles en Irán, Gaza y Líbano, ante lo cual la embajadora Kranz reiteró que “la intención nunca es dañar a la población civil”.

“El problema es que, como estrategia, estos -el régimen de Irán y también los terroristas de Hamás- actúan de una manera sistemática dentro de las poblaciones civiles. Los terroristas de Hamás, dentro de los centros muy poblados, utilizan su propia población como escudos humanos”, argumentó la embajadora Kranz.

También afirmó que, aunque los ataques israelíes apuntan a objetivos militares, a veces hay bajas civiles, algo que “el país lamenta”. Y aseguró que se han tomado medidas para reducir esos riesgos, como enviar alertas previas a los civiles y llamados a evacuar. “En Irán, lo mismo: el régimen también colocó parte de sus programas civiles, de sus centros de comando, en lugares muy poblados”, sostuvo.

“Entonces, lamentablemente, a veces hay daños a los civiles que, como digo otra vez, no son el objetivo de Israel. Ni el pueblo palestino ni el pueblo iraní son el enemigo de Israel. Al contrario, estamos más que interesados ​​en que las bajas civiles sean las mínimas posibles, y hacemos todo lo que está en nuestras manos para minimizarlo”, aseguró.