El 6 de marzo Fernanda Hansen cumplió un año en el matinal de Canal 13. Ha sido uno de los períodos más complicados para ella, no sólo por el accidente a caballo que la dejó fuera de pantalla por tres meses y medio y que le significa vivir con dos tornillos en su columna, sino porque el matinal de la red católica, Viva la mañana, siguió atravesando modificaciones y quedó en tercer lugar en 2009. 

"Yo creo que en términos profesionales es complicado estar en un barco que siempre ha sido estigmatizado e hipercriticado, quizás a veces injustamente", dice la periodista de 30 años, haciendo por primera vez un análisis de este ciclo.

Con respecto a los diferentes cambios que le ha tocado enfrentar en el programa, junto con las variaciones en la plana ejecutiva de Canal 13 y los diversos hechos que han remecido a la señal, Hansen dice: "Eso es algo que se escapa de mis manos. Yo soy una funcionaria del canal y ha habido administraciones distintas, editores y directores distintos.

Partimos con una propuesta, después pasamos por la parrilla flexible, los alargues (del matinal), luego por la parte social. Después yo no estuve. Y desde mi vuelta, no sé si es porque yo estoy distinta, o porque el equipo también cambió, el programa me acomoda mucho".

A pesar de estas palabras, la animadora está consciente de los resultados de Viva la mañana. Durante 2009 el espacio promedió, de marzo a diciembre, cinco unidades, quedando en  tercer lugar, según datos de Time Ibope. Y en lo que va de este año sigue en esa misma posición, pero con 4,2 puntos de rating, detrás de Buenos días a todos de TVN, con 7,9, y Mucho gusto, de Mega, con 5,2 en el mismo período.

"La eterna deuda del matinal no somos sólo nosotros", opina el rostro de Canal 13. "Yo creo que hay una sensación que viene desde hace muchos años de que el matinal está en deuda, pero tampoco sé por qué es tan así. Hubo una época en que le iba súper bien. Después tuvo sus bajas, pero si este no fuera un programa rentable no estaría en pantalla", agrega. Y Hansen explica que "siento que nunca le han dado el tiempo y la carrera es larga. Esto implica tiempo, y no existe la estrategia exacta (para el éxito)... Para eso necesitaría ser una bruja".

En este primer año la conductora también ha debido enfrentar versiones de conflictos, como el que le atribuyeron con Pamela Díaz, en febrero pasado. Entonces, Hansen hizo un comentario de unas fotos donde la modelo aparecía junto a su pareja. Díaz la encaró en pantalla diciéndole "a mí por lo menos me sacan a dar una vuelta. A ti te llevan a Chicureo no más".

En ese momento hubo versiones sobre una fuerte molestia de la periodista, asegurando que se habría quejado ante sus superiores. "Todo partió como una broma. Evidentemente una frase como aquella (la de Díaz) es en tono de broma y yo tengo sentido del humor. Se inventaron cosas y, según lo que me dijeron, salieron desde el propio canal. Pero de lo que tengo certeza es que no me metí ni sentí la necesidad de defenderme ni responder, porque mi conciencia estaba tranquila. Jamás quise estar involucrada en un conflicto y menos voy a ir a golpear la puerta de los ejecutivos para pedir la cabeza de nadie. Tampoco anduve llorando por los pasillos", responde.

Hansen no es de autocríticas públicas. "Me esfuerzo por hacer mejor mi pega, pero tampoco soy partidaria de la autocrítica destructiva... Más de alguna crítica debo tener, pero no tengo por qué hacerlas públicas. Las alabanzas en público y las críticas en privado, y eso para toda la vida", afirma.

En el plano personal y tras ocho meses de tratamiento por el accidente  que sufrió en julio de 2009, mientras cabalgaba en el predio de su pareja Felipe Camiroaga en Chicureo, cuenta que aún hay complicaciones con la cirugía a la que se sometió. A Hansen le implantaron placas de titanio en dos vértebras. Y en estos momentos señala que, "me he infiltrado tres veces y sigo rechazando los tornillos. No se cuál será la decisión de mi doctor. Veremos qué se hace. Yo trato y trato por todos los medios de aceptar los tornillos, pero mi cuerpo parece que no quiere".

Finalmente, y con respecto a la relación con Camiroaga, sólo comenta que "todo bien con Felipe".