Un competidor menos tiene a partir de este mes la industria de productos congelados en nuestro país. Es que las más de 20 compañías que venden este tipo de alimentos en Chile, se margina ahora Nestlé y más precisamente su marca Maggi, quienes actualmente eran los líderes del mercado.

La medida, según comentan al interior de la firma, se tomó debido a que la multinacional prefiere centrarse más en las otras líneas de Maggi, es decir, caldos, sopas y salsas principalmente, que destinar esfuerzos a las comidas preparadas congeladas y  que sólo representaban 1,5% del total del negocio.

Desde hace varios años que la compañía estaba evaluando el cierre de esa línea ubicada en su planta de Maipú; sin embargo, aseguran al interior de ésta, primero debían relocalizar a las 32 personas que trabajaban ahí, proceso que terminó hace un mes y gracias al cual no se despidió a ningún trabajador.

Nestlé producía, principalmente, lasañas, pollos apanados, canelones, papas duquesa y papas fritas congeladas bajo su marca Maggi, productos que no sólo dejarán de fabricarse, sino que  tampoco se importarán desde el exterior.

El plan de la firma, en tanto, no implica el cierre de otras líneas. Además, los sectores ocupados por los congelados serán reorientados para la elaboración de otros productos.

La firma ya había cerrado, a fines de los 90, la planta destinada a estos alimentos en Argentina, fecha en la cual invirtió US$ 150 millones en su filial local para producir congelados y desde Chile abastecer a los principales países de la región.

Con la salida de Nestlé, el mercado queda dividido en una gran variedad de actores, entre los que destacan Frutos del Maipo, Sadia, McCain, Frisac, Minuto Verde, entre otros.