SEÑOR DIRECTOR:

Querer mejorar las pensiones sin antes hacernos cargo del mercado laboral, su elevada tasa de informalidad y las lagunas previsionales, es como querer que el delantero juegue y haga goles solo. Uno excepcionalmente bueno podría hacerlo e, incluso, nos haría creer que el resto del equipo no tiene problemas. Sin embargo, cuando nuestro jugador estrella se lesione, envejezca o simplemente pase por una mala racha, todas las debilidades del conjunto saldrán a la luz, pero lo criticarán solo a él.

En este sentido, resulta clave que todo el equipo rinda. Si bien el delantero puede destacar gracias a sus cualidades, este sería aún mejor con un equipo sólido detrás. Para aprovechar los atributos de nuestro sistema previsional y alcanzar todo su potencial es necesario fortalecer a todos los jugadores; partiendo por el mercado del trabajo, donde hoy tenemos un 27,5% de ocupados informales y una baja cotización entre los jóvenes, resultando en pensiones hasta 25% menores. Debemos fortalecer debilidades como estas para darle un verdadero impulso a nuestro delantero y más solidez a nuestros ahorros.

Matías Vargas Vera

Investigador Observatorio Perspectivas