Dentro de las redes sociales temáticas, ASmallWorld cumple una función bastante clara: generar redes entre "ricos y famosos". Fundada el 2004, su idea original era entrelazar a sus miembros (aceptados sólo por invitación)  con datos de hoteles y estadías en otros países, productos de lujo, etcétera.  Ahora, tras la proliferación de redes sociales para todo, ASW ha vuelto al ataque, aunque con mayores restricciones. A quienes quieran ingresar no sólo se les exige invitación de un miembro; además, hay que poner 100 dólares sobre la mesa. Según su CEO, Sabine Heller, esto garantiza una comunidad reducida, selecta y con una sensación de pertenencia real. Hasta ahora, sólo 250 miembros pueden dar cuenta de eso.

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