Es cosa seria saltar, en cuestión de una o dos generaciones, de la Edad Media al siglo XXI, como ha ocurrido en muchas regiones de China. Y desde luego que no es fácil, porque ciertamente hay vínculos, tradiciones, formas de vida, valores, que se extinguen para siempre. Otras cosas se ganan, por supuesto, como queda de manifiesto en la cinta Esa mujer (2018).
25 jun 2021 08:42 PM