Este es fin de semana largo, así es que ojalá muchos de ustedes nos estén leyendo en la playa o el campo. Pensando en que deben estar relajados, con más tiempo, quizás incluso preparando un desayuno grande, esos como de película, y que al menos yo jamás llego a disfrutar, es que decidimos hacer una revista con más para leer. Quisimos dedicarla casi entera a una temática: la cerámica. ¿Por qué? Porque es bonita, siempre está cerca y todos de alguna manera nos relacionamos con ella.

La cerámica es, posiblemente, junto a los metales, uno de los mejores elementos para poder medir la evolución de un pueblo; su nivel de desarrollo cultural se equipara al nivel de factura de su alfarería. Y como podrán ver en este número, hoy ha evolucionado a productos increíbles, especialmente al introducirles nuevas tecnologías, lo cual las hace aptas para un sinfín de usos; pero, por otro lado, sigue siendo lo mismo que se ha replicado por años, distintos tipos de arcilla, cocidos a distintos grados de calor. La magia siempre ocurre en el horno.

Tratar de condensar todo este mundo en solo una revista, claramente era un tema imposible, necesitaríamos miles de páginas y demasiadas horas de investigación, pero lo que sí podíamos hacer era mostrarles lo que para nosotros es interesante.

¿Qué tipos son propios de Chile? ¿De qué lugares provienen? ¿Cómo la podemos reconocer? Si quiero aprender, ¿por dónde parto? Y así muchas ideas, datos y consejos sobre estas piezas que tienen la doble virtud de ser utilitarias y lindas.

Lean, recorten y guarden lo que les pueda parecer interesante y aprovechen, porque aún quedan dos días más completos de relajo.