MtOnline

[Test Drive] Skoda Yeti: Versatilidad y modularidad

<p>Particularmente difícil de encasillar en un estilo. Así es el Skoda Yeti en términos de diseño. Si bien el primer SUV de la marca checa muestra un look más relajado que el resto de la gama, con la disposición de un techo flotante, que puede elegirse en distinto color a la carrocería y una zona [&hellip;]</p>

Particularmente difícil de encasillar en un estilo. Así es el Skoda Yeti en términos de diseño. Si bien el primer SUV de la marca checa muestra un look más relajado que el resto de la gama, con la disposición de un techo flotante, que puede elegirse en distinto color a la carrocería y una zona trasera vidriada que lo hace ver como un modelo de tres puertas; sus formas cuadradas no le aportan en una estética más moderna, aunque sí a su habitabilidad interior y capacidad de carga.

La caída en 90° del pilar D deja un maletero totalmente vertical, que busca aprovechar al máximo su volumen de carga (405 litros). Si bien hay otros SUV del segmento con maletero más grandes, el Yeti saca provecho de cada centímetro cúbico, gracias a la gran versatilidad de los asientos traseros, abatibles muy fácilmente y que permiten ampliar hasta los 1.760 litros la carga. Asimismo, gracias a que su portalón tiene una gran apertura es fácil cargarlo.

El Skoda Yeti es un auto que ya lleva sus buenos años en el mercado. En Chile está disponible desde hace dos años, pero se lanzó a nivel mundial en 2009, para luego recibir una actualización un par de años después. Pues bien, en el interior es donde más se nota el paso del tiempo. La instrumentación, la consola central y hasta la tapicería así lo hacen ver.

La practicidad, eso sí, es su fuerte. Se nota en la disposición de múltiples espacios portaobjetos repartidos por todo el habitáculo. Incluso en el maletero hay ganchos y rieles.

Los asientos también resultan muy funcionales, al poderse plegar o extraer  fácilmente, pero podrían ser más cómodos, más mullidos, con tapiz de cuero y regulación eléctrica, por lo menos el del piloto. Todo esto pensando en su precio ($ 18.990.000).

La versión Elegance equipa climatizador bizona, asientos delanteros calefaccionados, computador a bordo, volante multifunción, sistema de audio con pantalla táctil a color, bluetooth y puertos auxiliares, frenos ABS, control de estabilidad, velocidad crucero, seis airbags y sensores de retroceso, entre otros. Vale mencionar aparte el techo panorámico corredizo, que intensifica la sensación de amplitud, así como la excelente luminosidad que hay al interior del Yeti.

A nivel mecánico, equipa un 2.0 litros turbodiésel con 150 Hp, una caja DSG 6 de doble embrague y tracción integral. Nos dio 17 km/l en ciclo mixto (ciudad/carretera).

Su motor es fuerte, que al acelerarlo hace notar de inmediato su potencia y torque. En tramos de manejo relajado, se siente un tanto pesado, no así cuando entra a la carretera, donde se desplaza ágilmente.

El Yeti se siente bastante estable, lo que entrega seguridad en la ruta. Se agarra muy bien, por ejemplo, al girar en curvas con velocidad.

La dirección tiene un excelente tacto y comunica, a su vez, muy bien lo que ocurre en el pavimento. Los lomos de toro o baches en el asfalto no son problema, gracias a su suspensión de buena altura y recorrido.

El Yeti se inscribe como opción para quienes buscan espacio y versatilidad, así como también un auto potente y rendidor. El único pero, quizás, sería su precio.

A favor: Espacio y luminosidad interior, zona de carga bien aprovechada y buen confort de marcha.

En contra: Precio de versión tope elevado, look interior austero y asientos traseros duros.

Ficha técnica: Skoda Yeti 2.0 TDI 4X4 Elegance

» Motor: 2.0 litros

» Potencia: 150 Hp

» Torque: 340 Nm

» Transmisión: DSG 6 vel.

» Largo: 4.222 mm

» Maletero: 405 litros

» Precio: $ 18.990.000

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.

No sigas informándote a medias 🔍

Accede al análisis y contexto que marca la diferenciaNUEVO PLAN DIGITAL $1.990/mes SUSCRÍBETE