La tarde del jueves, el Tribunal Oral de lo Penal de Iquique dictó una sentencia condenatoria en contra de tres imputados venezolanos que habrían asfixiado y posteriormente lanzado al mar a un hombre en esta ciudad el pasado 23 de junio de 2023.

“Esta causa inició tras el hallazgo de un cadáver de sexo masculino flotando en el sector de playa Bellavista en la comuna de Iquique, donde se logró verificar la intervención de terceros, puesto que este cuerpo mantenía señales de ahorcamiento”, explicó la fiscal (s) de Análisis Criminal y Focos Investigativos de Tarapacá, Daniela Campusano.

Durante el juicio en contra de estas personas, que se extendió por cuatro días, la fiscal exhibió las declaraciones entregadas por los detectives de la Brigada de Homicidios (BH) de la Policía de Investigaciones (PDI) que encontraron el cadáver de la víctima, los que habrían empadronado a testigos y extraído información de especies incautadas.

Además, entregó los detalles de la autopsia realizada por el Servicio Médico Legal (SML), que determinó que la muerte de la persona se produjo por “una asfixia por compresión externa del cuello, compatible con un homicidio“.

Así las cosas, el tribunal dictó penas por los delitos de homicidio simple a los tres imputados. Para José Manuel Álamo Rodríguez -alias “Pelón”- y Johan Francisco Satine -alias “Lobo”- dictó una sentencia de 12 años de presidio, mientras que a Rubén José Salazar Salazar -alias “Aragua”- lo condenó a 10 años de presidio, todos de carácter efectivo.

Asesinato por compraventa de drogas

Según el detalle entregado durante el juicio oral, el crimen se produjo durante la noche del 22 de junio de 2023 y la madrugada del día siguiente.

La víctima habría intentando comprar droga a una mujer en un ruco cercano a la piscina municipal de Iquique, lo que habría sido escuchado por los tres imputados y otro cuarto sujeto todavía desconocido, apodado “Menor”, todos quienes se dedicaban al microtráfico de drogas en este sector.

Molestos frente a la solicitud, abordaron a la víctima y la golpearon con pies y puños y con una especie de fierro. Tras ello, la llevaron a una especie de cueva, donde continuaron con los ataques para finalmente acabar con su vida asfixiándolo con un pantalón.

Posteriormente, lo amarraron de pies y manos y lo lanzaron al mar. El cuerpo de la víctima fue encontrado el 23 de junio a la orilla de la playa Bellavista.