El protagonista de "Jackass", Ryan Dunn, tenía un nivel de alcohol en la sangre que era más del doble del limite legal cuando él y un pasajero murieron en un choque de auto, según un reporte toxicólogico difundido este miércoles.

El Porsche de Dunn podría haber estado rodando a más de 225 kilómetros por hora en una zona de 88 kilómetros por hora cuando saltó una valla de seguridad, voló hacia una barranca y chocó contra un árbol antes de estallar en llamas, dijo la policía.

Su nivel de alcohol en la sangre era de 0,196 cuando ocurrió el accidente el lunes por la mañana, según un reporte toxicólogico difundido por la policía municipal de West Goshen. El límite legal para los automovilistas es de 0,08.

Dunn, de 34 años, y su pasajero Zachary Hartwell, de 30, murieron el lunes después de salir de un bar en West Chester, Pensilvania, llamado Barnaby's of America. Horas antes del choque, Dunn publicó en Twitter una foto de él, Hartwell y un tercer hombre bebiendo en el bar. La fotografía ha sido retirada de la red.

La policía del estado de Pensilvania dijo que no se presentarán cargos contra el bar.

El sargento William La Torre, de la Junta de Control de Alcohol, dijo que la agencia determinó que al parecer Dunn no estaba visiblemente intoxicado cuando le sirvieron dos cervezas y seis tragos durante las cuatro horas que estuvo en el bar.

La Torre dijo que los aficionados a "Jackass" y otras personas, aunque no el personal del bar, le llevaron otros tres tragos a Dunn al final de la noche, en una mesa en la parte trasera del establecimiento, fuera de la vista del cantinero.

Los empleados del bar dijeron que Dunn no pareció borracho en ningún momento de la noche y un video de seguridad que fue mostrado a la policía apoya esa conclusión, dijo Frank Herron, el gerente del bar.

"Habló con claridad. Caminaba con seguridad. Llegó brincando y se fue brincando", dijo Herron, para quien "si estos resultados son veraces, me sorprenden. Nosotros estábamos muy seguros de que no había bebido tanto".

Herron dijo que el bar contactó la Junta de Control de Alcohol después de la muerte de Dunn.