Las cinco razones por las que más pelean los vecinos

Problemas de copropiedad, como filtraciones, o no pago de gastos comunes encabezan lista, según Ministerio de Justicia.




"El vecino de arriba tiene una filtración hacia mi departamento". "Un propietario no ha pagado los gastos comunes y no podemos hacer arreglos". "El vecino instaló una piscina en un espacio que es de toda la comunidad". Estas son algunas de las quejas más frecuentes que llegan todos los días hasta las oficinas de la Unidades de Justicia Vecinal (UJV) de la Región Metropolitana en busca de una solución.

Los conflictos de este tipo, agrupados bajo la categoría de copropiedad inmobiliaria, son los que encabezan  la lista de los cinco problemas que más enfrentan a vecinos en estas Unidades dependientes del Ministerio de Justicia, que son parte de un programa piloto que opera en 20 comunas de la capital, desde 2011.

Entre mayo de ese año y diciembre de 2014, los conflictos de mayor ocurrencia son los referidos a copropiedad inmobiliaria (31%), arrendamiento (11%), convivencia entre vecinos (9%), cobro de pesos (8%) y servidumbres legales (5%), los cuales representan el 64% de los casos ingresados. En la lista siguen los problemas por ruidos molestos  y tenencia de mascotas, con un 5% y 4%, respectivamente.

"En copropiedad inmobiliaria se agrupan parte importante de todos los conflictos que se dan en una comunidad, por eso la cifra es tan alta", dice Martín Morales,  jefe de la zona Poniente, una de las cuatro que operan en la Región Metropolitana, las otras son la Norte, Sur y Oriente, que en conjunto atienden a un 50% de la población de la capital.

En arrendamiento están las disputas por el no pago mensual del arriendo o un desalojo sin previo aviso. En el cobro de pesos, los casos de clientes que piden fiado al  almacén del barrio y luego no pagan. En convivencia, en tanto, las peleas son porque el vecino "habla mal de mí en la comunidad" o "tira la basura en mi casa",  y en servidumbres legales, los problemas se generan porque un vecino no quiere pagar la  parte que le corresponde de un muro medianero.

Morales explica que este programa permite entregar soluciones a problemas que no tienen una respuesta en el sistema formal de justicia, como los Juzgados de Policía Local o los tribunales civiles, o que si lo tienen "es díficil acceder a ellos por las barreras de acceso", como el costo que significa contratar a un abogado. De ahí que se permita el ingreso de conflictos por arriendo. Sólo se pide que el requirente -que puede ser el arrendador o el arrendatario-  o requerido -también puede ser el arrendador o el arrendatario-, tengan domicilio o residencia laboral en algunas de las 20 comunas que son atendidas por las Unidades de Justicia Vecinal.

También aceptan casos de muchos comerciantes que buscan  que sus clientes les paguen, como el caso de Ermelinda Jiménez, de Paine, quien recuperó 42 mil pesos, en dos pagos tras llegar a una mediación con una clienta. "Es un sistema que yo recomiendo. El otro día llegó llorando acá una señora que también tiene negocio con el mismo problema, y le dije que hiciera lo mismo", señala Ermelinda.

Morales comenta que los comerciantes cumplen un rol social importante en el barrio y le fían al vecino cuando está sin trabajo, pero después algunos no pagan cuando no recuperan el empleo, afectando así el capital de trabajo de los almaceneros.

MECANISMO

Las UJV funcionan a través de la presentación de un requerimiento por parte de un usuario, ya sea presencial, telefónico o a través del sitio  www.ujv.cl.

En promedio tardan 43 días en resolver un conflicto, el que muchas veces se ha mantenido por años entre los vecinos. De los 23.596 casos que han ingresado hasta la fecha, el 71% fue aceptado y en el resto  de las solicitudes, las personas recibieron  orientación legal, porque el objetivo de este sistema es atender todo conflicto que no sea de competencia penal, laboral, ni en materias de familia de mediación obligatoria.

Desde el Ministerio también señalan que la efectividad es alta. En el  81% de los casos han cumplido, ya sea total o parcialmente, los compromisos entre las partes. Además, de acuerdo a una evaluación de diciembre del año pasado, el 98% de los usuarios volvería a utilizar el servicio y el 99% lo recomendaría.

MAS UNIDADES

Carlos Frontaura, decano de la Facultad de Derecho de la U. Católica, desde hace años se ha interesado por el tema y ha escrito publicaciones sobre la justicia cercana o vecinal. "Este es un programa importante y perfectamente extensible al resto del país y sería valioso que se hiciera. Como sociedad tenemos espacios en blanco, conflictos que se producen dentro de nuestras comunidades, que no encuentran  cauces razonables para resolverse de manera eficaz, eficente y rápida", dice el abogado.

A su juicio, la implementación de este tipo de servicios permite que los problemas en los barrios no sigan escalando o lleguen a hechos de violencia. "El servicio de justicia es fundamental para la sociedad y tan importante como la educación y la salud, sobre todo en sociedades complejas como la nuestra", agrega Frontaura.

Karina Cerda, coordinadora del programa de las UJV al interior del Ministerio de Justicia, señala que la extensión del sistema es algo que está en evaluación. En una primera etapa se avanzaría en llegar a las comunas no cubiertas de la Región Metropolitana, y en una segunda, al resto de las regiones.

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