Las dramáticas historias humanas detrás del incendio de la discoteca Kiss en Brasil
Un soldado que tras escapar de Kiss entró dos veces a rescatar personas y finalmente murió y la historia de dos estudiantes paraguayos que no asistirían a la fiesta son algunas de las historias que dejó la tragedia Santa María.

Esta son las historias de algunas de las víctimas del incendio que consumió la discoteca Kiss, la madrugada del domingo en Brasil, que eran en su mayoría estudiantes de distintas facultades de la Universidad Federal de Santa María.
ESTUDIANTES PARAGUAYOS
Guido Ramón Brítez Burró, de 21 años, era un estudiante paraguayo que fue a la fiesta de la discoteca Kiss acompañado por su compatriota José Volpe, quien pudo salvarse pero resultó herido y debió ser hospitalizado, aunque está fuera de peligro.
Los dos estudiantes paraguayos no iban a ir a la fiesta, pero después decidieron acompañar a los estudiantes de veterinaria que eran los organizadores de la fiesta.
SOLDADO HÉROE
El soldado Leonardo de Lima Machado, de 26 años, consiguió escapar con vida de las llamas que se apoderaron de la discoteca durante una fiesta universitaria, pero volvió a entrar dos veces en el local para ayudar a las víctimas. Sin embargo en la segunda oportunidad quedó atrapado y falleció junto a otras 230 personas.
HIJO ÚNICO
Joao Carlos Barellos da Silva fue hallado muerto en el baño del local. Unas 180 personas murieron en los baños, asfixiadas en medio de un tumulto provocado por el pánico, buscando infructuosamente la puerta de salida.
"Fue un hijo maravilloso. Esto es muy difícil, era mi hijo único, lo crié prácticamente sola porque su papá falleció cuando tenía 8 años. Tuve que reconocerlo entre esa cantidad de cuerpos (...) Este es un dolor que no tiene comparación", dijo a la AFP su madre, Gelsa Ina Barcelos.
GANARON ENTRADAS PARA LA DISCOTECA
Los hermanos Marcello y Pedro Salla, de 20 y 17 años decidieron ir a la discoteca a última hora del sábado, después de que Marcello, el mayor, se ganó un ingreso para dos personas para el área VIP de la discoteca y decidió acudir en compañía de Pedro, su hermano menor.
EL GAUCHO
El estudiante Silvio Beurer Filho, de 31 años, estudiante de agronomía y ganadero, era patrón en una hacienda familiar en la localidad de São Pedro do Sul y muy querido entre sus compañeros del "piquete" -denominación a los grupos que preservan la tradición de los gauchos- Junção dos Cascos.
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