El 22 de enero, un oficio clave salió desde la Corte Suprema a uno de los principales bancos del país. El escrito, emitido por el miembro del máximo tribunal Héctor Carreño, pedía a la entidad "el correo electrónico y número de teléfono que tuviese registrado Marco Rodríguez Ortega, quien sería cliente de ese banco según lo informado por la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), Interpol".

El 2 de febrero, el banco remitió una hoja con dos datos claves: un número de teléfono celular y una cuenta de correo electrónico de Gmail.

De esta forma, la PDI confirmó la existencia de la cuenta bancaria y obtuvo el primer antecedente concreto de que el ex mirista Marco Rodríguez (42) se encuentra en el país.

El ex subversivo, vinculado al llamado Ejército Guerrillero de los Pobres-Patria Libre (EGP-PL), está prófugo de la justicia brasileña desde el 8 de octubre de 2010. Ese día Rodríguez fue beneficiado con la salida temporal de la Penitenciaría de Itaí, ubicada a 287 kilómetros de Sao Paulo, para celebrar el Día del Niño. Nunca más volvió a presentarse al penal.

Marco Rodríguez se encuentra condenado a 30 años de cárcel, por el secuestro del publicista Washington Olivetto, ocurrido el 11 de diciembre de 2001.

Esta operación fue liderada por el ex frentista Mauricio Hernández Norambuena, alias el "Comandante Ramiro", quien actualmente cumple condena en Brasil.

El ministro Carreño decretó la orden de detención contra Rodríguez el pasado 23 de junio de 2014. La causa por la extradición de ex subversivo se inició el 27 de noviembre de 2012, tras una petición de la Embajada de Brasil.

En la PDI hay dos unidades que están trabajando en dar con el paradero del prófugo. Una es la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (Bipe), unidad que dio con la cuenta bancaria, e Interpol.

Entre las diligencias que han realizado las policías se encuentran seguimientos a sus familiares. La dificultad, dicen fuentes policiales, es que Rodríguez estaría tomando una serie de medidas para no ser detectado. Por ejemplo, se estima que cambiaría de teléfono celular cada dos semanas.

Otra pista que había dado antecedentes de la presencia del hombre en Chile datan de 2012, cuando se determinó que una motocicleta había sido adquirida a su nombre.

Su nombre también cobró relevancia en junio de 2013, en el marco de la indagación a un asalto a un banco. En las indagaciones que realizó Carabineros en ese tiempo, se determinó que ex subversivos podrían estar ligados a este atraco y es en este contexto que apareció el nombre de Marco Rodríguez. El hombre no tiene antecedentes penales en el país.