Difícil es olvidar el gol que Diego Armando Maradona le marcó a los ingleses en el Mundial de México 1986, calificado muchas veces como el mejor de la historia. Pero al igual como dicha anotación es inolvidable, la fractura de tobillo que sufrió el "10" un día como hoy pero hace 25 años, también lo es, especialmente para los argentinos y los españoles.

En ese entonces el ídolo transandino defendía los colores del Barcelona en un partido que ganaban fácil por 2-0 al Bilbao, hasta que en el minuto 59 tras una balón controlado por el volante, apareció de la nada el central Andoni Goikoetxea quien con una brutal entrada en plancha le fracturó el tobillo izquierdo al instante.

Pese a que Maradona intentó ponerse de pie, el estadio quedó en silencio por algunos segundos donde sólo se escuchaban los gritos del propio jugador. Luego, el silencio sería reemplazado por pifias y reclamos del público, cuando el árbitro Bartolomé Jiménez Madrid sólo amonestó con amarilla al infractor.

"¡Me rompió, me rompió!, chillaba 'Dieguito' momentos antes de salir del campo en camilla con las manos en la cara", recuerda Mundo Deportivo de España, citando además a Angel Mur, masajista azulgrana que fue el primero que atendió a Maradona. "Al saltar al campo pensé que era un golpe muy duro, pero al llegar allí Diego ya sabía que era algo grave", agrega.

Sport, en tanto, destacó lo que vino después del partido en cuestión, donde el técnico César Luis Menotti reclamaba tras el partido. "¿Debe morirse alguien para tomar medidas?", recordó la publicación, agregando que "Clemente, técnico del Athletic, recordó que 'no sólo Goiko ha sido duro' y que 'a lo mejor dentro de cinco días Maradona no está tan grave'".

El diario deportivo Olé, por su parte, tituló con "la noche del crac al crack", agregando en la bajada que "Andoni Goikoetxea pasó a la historia por romper el tobillo izquierdo de Diego".

El matutino además recuerda los descargos del defensor: "No quiero que se malinterprete. No los conservo como el que conserva una pieza de caza. Simbolizan para mí la cruz y la cara del fútbol. Por un lado, el acoso que sufrí tras la lesión de Diego; por el otro, lo emotivo que resultó el homenaje de San Mamés".

Finalmente, Clarín señala que "en la larga noche en que Maradona pasó por el quirófano, hubo desfile de visitas. El que más tiempo permaneció cerca del crack fue Enrique Castro 'Quini'", agregando además una cita del mencionado jugador. "Aquella noche fui con mi mujer (Mari Nieves) a la clínica. Éramos amigos y quise animarlo".