Unas 4.000 personas evacuadas el viernes  pasado producto de un incendio forestal que arrasó la Costa del Sol española, cerca del turístico municipio de Marbella, regresaron hoy a sus hogares luego de que el fuego fuera estabilizado tras haberse cobrado una vida y devastado más de 5.000 hectáreas.

"Se ha frenado por completo el perímetro del incendio, por lo que se  ha dado por estabilizado", informó por la tarde un comunicado de la Junta de  Andalucía, el gobierno autónomo regional. 

"Las tareas de extinción, sin embargo, proseguirán en la zona dado que en  el interior del perímetro aún pueden permanecer puntos calientes", agregó. "Es  necesario refrescar bien el terreno antes de despejar por completo la  posibilidad de que se produzcan reproducciones", precisó.

Durante la mañana volvieron a sus casas todos los vecinos de Ojén, localidad de unos 3.000 habitantes que había sido evacuada por completo, informó a la agencia AFP una portavoz de la Junta.

Junto a una de las casas alcanzadas por las llamas en Ojén, los socorristas encontraron el viernes el cadáver calcinado de un hombre. "Según la información disponible se trata de un  alemán de 54 años que responde a las iniciales C.R.", precisó la portavoz.

Otras cinco personas resultaron heridas en el incendio, que se declaró el  jueves por la tarde en la zona montañosa que domina las famosas playas de la  Costa del Sol, muy apreciadas por los turistas extranjeros.

España registra este verano incendios devastadores después de haber sufrido  el invierno con menos precipitaciones desde hace 70 años. 

Según datos del ministerio de Agricultura, las llamas han arrasado 153.156  hectáreas entre el 1 de enero y el 26 de agosto, es decir el 0,55% de la  superficie forestal del país, una catástrofe sin precedentes en los últimos diez años.