Semanas después de la polémica causada por el sacrificio público de la jirafa Marius en el zoológico de Dinamarca, una noticia de gran repercusión internacional, el centro ha sacrificado a cuatro leones para dar cabida a un nuevo macho.

El centro recibió el lunes a un nuevo león de tres años de otro zoológico danés, el que será presentado en los próximos días a las dos leonas que están en edad reproductiva.

La dirección del zoológico argumentó que su decisión fue tomada por el riesgo de endogamia y la edad avanzada de dos de los felinos, mientras que los otros dos, a los que se trató de colocar sin éxito en otros centros, eran demasiado jóvenes para poder sobrevivir frente al nuevo macho que ha llegado.

"Debido al comportamiento natural de los leones, el zoológico tuvo que aplicar eutanasia a dos leones ancianos y dos pequeños que no habían crecido lo suficiente como para sobrevivir por sí solos" e inevitablemente "habrían sido muertos por el nuevo macho", señala una nota la dirección del zoológico. 

EL CASO MARIUS
"Creo que el caso de Marius ha ayudado a que más personas estén mejor informadas. No nos asusta lo que pasó, porque lo que hacemos es lo más apropiado desde un punto de vista profesional", declaró el director del centro, Steffen Stræde.

El sacrificio de Marius de 18 meses en febrero pasado provocó protestas a nivel internacional, de las que la institución danesa se defendió insistiendo que se trata de una práctica habitual motivada por razones genéticas, pues pero era incompatible para aparearse con las hembras del centro.

La posibilidad de que el sacrificio de los leones, que murieron por una inyección letal, provoque una reacción similar no asusta al zoológico de Copenhague.

"Estamos preparados como solemos hacer: contamos abiertamente y con honestidad lo que hacemos y lo que defendemos. No nos escondemos en ningún agujero", dijo Stræde.