SEÑOR DIRECTOR:

Durante la semana se votó en el Congreso el proyecto que buscaba permitir la apertura y funcionamiento de todo el comercio durante el plebiscito constitucional. Lamentablemente, la iniciativa -que se presentó en agosto por parte del legislador- finalmente fue rechazada en el Senado.

Decisiones de esta índole requieren de una planificación anticipada, especialmente cuando esta medida golpea al sector más impactado en los últimos 18 meses, lo que se suma a otros problemas que tenemos en el país, como las altas tasas de desempleo, la proliferación del comercio informal y crisis económica.

Diciembre es una fecha clave para la industria. De acuerdo con nuestras estimaciones, se crean más de 40 mil puestos de trabajo en este período, por lo que esta restricción implica que varios trabajadores pierdan la oportunidad de ganar ingresos que en muchos casos varía de acuerdo a comisiones o ventas. Hoy, pierde el empleo y quien gana finalmente es el comercio informal y la inseguridad que se toma las calles, negando el espacio a locales que cumplen con sus compromisos legales, tributarios y de protección al consumidor.

De aquí en adelante, es crucial reflexionar sobre la tramitación de propuestas similares en futuras elecciones o fechas especiales, en un contexto además de voto obligatorio y con el compromiso de todo el comercio de flexibilizar permisos y horarios para cumplir con el deber cívico y seguir entregando servicios a las personas.

Esperamos que podamos prevenir en el futuro los impactos negativos que generan en el comercio establecido y en las personas estas restricciones sin justificación.

María Teresa Vial

Presidenta Cámara de Comercio de Santiago