En los últimos días, en el partido que milita Carolina Tohá, el PPD, tomaron una definición: aportar 60 millones de pesos más a la campaña presidencial de su abanderada. Ya desembolsaron 40 millones a inicios de junio, el mismo monto que comprometió el Partido Socialista (PS) la semana pasada.

En la colectividad que lidera Jaime Quintana -que no goza de buenas finanzas internas- están preocupados y saben que tienen que hacer un esfuerzo adicional en la recta final de la contienda electoral, donde medirán fuerzas con Jeannette Jara (PC), Gonzalo Winter (FA) y Jaime Mulet (FRVS).

En el PPD -al igual que en las otras colectividades del Socialismo Democrático (PS, Partido Radical y Liberal) que sustentan la campaña de Tohá- están inquietos por la irrupción de Jara, quien, de acuerdo a los sondeos que manejaban antes de la veda electoral, lideraba las preferencias presidenciales. Algo que, con este último esfuerzo, esperan contrarrestar.

El envión económico se invertirá en publicidad en radio, redes sociales e impresión de nueva propaganda que mostrará las cinco medidas emblemáticas de la candidatura de la exministra del Interior, como la duplicación del personal de Carabineros y el fin del secreto bancario. Todo esto ad portas del fin del periodo de campaña, que concluirá el próximo jueves.

Además, la candidatura prepara ajustes en el despliegue. Según expuso el experto electoral del PS Hernán García, en una reunión del equipo electoral del comando esta semana, concentrarán esfuerzos en la Región Metropolitana, Valparaíso y el Biobío. Las tres circunscripciones con mayor población del país. En ese encuentro, señalaron que en esas zonas se juega la elección.

Desde el comando transmiten que en el despliegue tendrán un rol fundamental las autoridades de los partidos que se identifican con la candidatura. Destacan que hay alrededor de cien alcaldes con ellos, además de los gobernadores del Socialismo Democrático y cerca de mil concejales.

Tohá tiene como principal contendora a Jara, contra quien ha endurecido férreamente el tono en los últimos días. Esto a tal punto de llegar a decir, el miércoles en Mega, que “no soy partidaria de que el PC gobierne al país (...). Lo mejor para el país es que tengamos un progresismo encabezado por los sectores o el proyecto que mi mundo representa”.

La arremetida fue tan dura, que llegó a incomodar al PS, una colectividad que tiene una cercanía histórica con los comunistas, afianzada en el gobierno de Salvador Allende. En la militancia hay voces que consideran que Tohá cayó en un exceso. La directiva del partido, encabezada por la senadora Paulina Vodanovic, abordó ese malestar con los alcaldes y concejales socialistas.

En medio de esa molestia socialista, ayer Tohá manifestó que “no acepto que se me ponga el título de anticomunista. He trabajado toda mi vida con el PC”.

Además, llamó a no “transformar” las diferencias en anticomunismo.

En el comando de Tohá explican que destinaron varios días de campaña a responder al Frente Amplio por la franja que ellos elaboraron, en que se hacían ácidas críticas a los partidos que integraron la Concertación. Hoy la apuesta es dar vuelta la página en ese asunto, dejar a Gonzalo Winter en segundo plano y concentrar la energía en contrarrestar a la exministra del Trabajo.

Jara y su comando, a sabiendas de la arremetida en su contra, decidieron evitar cualquier tipo de confrontación directa. Mediante minutas, mandaron a sus voceros a no caer en disputas estériles.

En el documento, difundido esta semana por este medio, se llamó directamente al comando a “no caer en provocaciones. Hoy tenemos la ventaja y eso impulsa a que algunos quieran golpearnos. No les sigamos el juego, mantengamos nuestra diferenciación sin caer en el barro”.

Esa misma lógica se buscará imponer desde el PC de aquí hasta el día de la elección. Dentro del comunismo incluso ha llamado la atención la nula participación en el proceso del exalcalde de Recoleta Daniel Jadue, quien pese a conseguir una rebaja de sus medidas cautelares -que ahora le permite salir a la calle- no se ha inmiscuido en aspectos públicos de la cruzada presidencial. De hecho, en su último programa de Sin Maquillaje, no dijo ni una sola palabra sobre Jara ni los comicios del próximo domingo.

Con eso despejado, lo que ahora intentará el comando de la exministra del Trabajo es subir aún más los niveles de conocimiento de su abanderada y mostrar sus “habilidades blandas”, que la han llevado a que la comparen con el estilo de la expresidenta Michelle Bachelet.

Junto a eso, las actividades de estos días tendrán un foco claro: las mujeres y los jóvenes, segmentos donde la comunista habría conseguido crecer a costa de los simpatizantes de Winter.

Así, este sábado Jara asistiría a la marcha por el orgullo LGBT+ y, posteriormente, encabezará un gran encuentro de mujeres en el Teatro Cariola, una de las actividades a las que más expectativas le han puesto en el comando.

Previo al acto de cierre de campaña, que aún se está definiendo, la abanderada del PC intentará visitar las regiones del Maule y de Valparaíso y distintas comunas de la RM, donde encabezará banderazos, como en Peñalolén.

Además, la exministra también pretende visitar la Universidad Alberto Hurtado y esta semana ya estuvo en el Campus San Joaquín de la Universidad Católica, donde encabezó un foro con estudiantes. Allí también respondió a la ofensiva de Tohá. “Los debates, a veces, previo a las elecciones, se tensionan, se dicen cosas. Pero yo les bajo el perfil a esas declaraciones, porque son a partir de la contingencia de la contienda electoral”, dijo Jara.

Winter ajusta diseño y Mulet prioriza las regiones

El alza de Jara también ha sido mirada con atención por la campaña de Gonzalo Winter, quien estos días concentrará sus esfuerzos en el ajuste de estrategia determinado por su comando, con el que buscarán emplazar a Jara.

De este diseño dieron cuenta esta semana el secretario general del FA, Andrés Couble, y la encargada comunicacional del comando, Beatriz Sánchez, quienes pusieron sobre la mesa esta arremetida centrada en intentar evidenciar el quiebre ideológico que existe al interior del Partido Comunista, pues en el FA creen que eso no da “garantías de gobernabilidad”.

“La candidatura de Jara tiene una debilidad en cuanto a las diferencias entre ella y parte de su partido. Eso la debilita para enfrentar a la derecha en noviembre y también la debilita en caso de que encabece un siguiente gobierno”, dijo Couble a este medio, en referencia a las “dos almas” que conviven en el PC: una identificada con Jara y otra con Jadue, Lautaro Carmona, Juan Andrés Lagos, entre otros.

En el FA concentrarán esfuerzos en Valparaíso. Saben que en esa región tienen bolsones de votos significativos que no pueden descuidar. En la comuna, en particular, existe una amenaza latente: el exalcalde Jorge Sharp (Transformar Chile), quien dio su apoyo a Mulet y ha ejercido como su vocero, por lo que asumen que él convocará a una porción del electorado ahí.

Además, también contará con el refuerzo de las figuras más importantes de su sector, como el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic, quien saldrá nuevamente en la franja televisiva. Otro foco de la campaña de Winter en la recta final será intentar poner sobre la mesa que ellos, como Frente Amplio, ya derrotaron en una segunda vuelta presidencial al republicano José Antonio Kast, en referencia a la victoria del ahora Presidente Gabriel Boric en 2021.

Por último, el candidato Jaime Mulet concentrará sus últimos días de campaña en la visita a regiones. El lunes, por ejemplo, estará casi todo el día desplegado en Valparaíso, mientras que el martes visitará las comunas de Rancagua y San Fernando, en la Región de O’Higgins.

Mulet encabezará el miércoles el hito más grande para despedir su cruzada presidencial, pese a que el jueves será el cierre de campaña. La actividad será en Copiapó, en la Región de Atacama. Se trata de la zona a la que representa como diputado y donde podría postular como candidato a senador este año, en caso de no conseguir el triunfo en la primaria.

Así, el jueves Mulet pretende tener un último despliegue en la RM, donde en la noche comerá con sus colaboradores más cercanos para despedir los agitados días de campaña.

Ese es el panorama que enfrentan los cuatro candidatos de cara a los próximos días. Este domingo se verán las caras otra vez, en un nuevo debate televisivo que promete sacar más ronchas.