La familia real japonesa, de más de 2.500 años de antigüedad, se está quedando sin herederos al trono. En 1889 se les impidió a las mujeres ser emperatrices, por ello cuando el príncipe heredero Naruhito asuma como emperador este 1 de mayo, la línea de sucesión solo contará con dos candidatos.
Valentina Jofré
1 may 2019 03:22 PM