Nachos, los inseparables

El efecto sal y crunchie que tienen los nachos hace que sean como el picadillo oficial que acompaña a la cerveza. A mí me fascinan. Los encuentro un salvavidas llenador que tanto en restaurantes como en casa quedan regio con una simple palta molida. Tres cosas que no fallan para acompañarlos: queso crema a temperatura ambiente mezclado con salsa picante de Pancho Villa. Si se animan, un poquito de cebollín o ciboulette queda mejor. Palta, como les dije, con tabasco y tomatitos picados. Es como un guacamole poco cuidado, pero para nachear está más que bien.

Tomate a la procesadora con jalapeños, cuantos quieran. Procesan y untan.

Corona Light
Parto diciendo que todo lo light me gusta, lo considero un aporte y lo celebro. Claro, si uno, que casi nunca escatima en cantidad recibe una de las cervezas más famosas del mundo con su versión light y sólo 99 calorías, ya hacemos fiesta. Más liviana en sabor -en verano es casi una gracia- y con ese dejo clarito y alimonado que la hace característica, aparece y se afirma esta nueva versión de Corona, además con nada de grasa y 5 gramos de carbohidratos. Genial, femenino y para estar instalados en terrazas junto a ellas y unos buenos pares de pack. Punto aparte, tiene un look una gota más vintage que me parece un encanto. En supermercados y botillerías.

Michelada

Las adoro. Todo lo que mezcle un bebestible con picante me parece bueno, y que convoque a la preparación y denote cuidado es más que un agrado. Tengo dos actitudes frente a la michelada: 1) me entregué y agoté buscando un lugar capitalino que la prepare bien y a un precio razonable (entendamos por favor que el pedido es de 3 por cada sentado en  la mesa, por lo mismo resulta irrisorio cobrar casi 5 mil pesos) y que realmente esté todo rico, temperatura, picantito, cerveza. Así que postura 2), las micheladas se hacen en casa. Y muy fácil. Plato con sal gruesa machacada y merkén, un poquito. Vaso con el borde recién pasado por la mitad de un limón y hundido en la sal para que quede pegadito. Adentro del vaso, un par de hielos, jugo de limón, una gota de sal, varias de tabasco, se revuelven y llenan con cerveza helada.

Schop con lugares
Qué placer esto de que haya varias marcas artesanales con grifos de distintos tipos. ¡Me encanta! Y más el poder renunciar a esas dos cervezas que marcaron nuestro pasado para llenarnos de marcas que avalan la pequeña empresa. Desde la Kross, que ahora pasó a manos mayores, a la Capital, que saboreé el otro día en el Fresia de Bellavista (Constitución 92). Qué decir la buena selección en el Ciudad Vieja (Antonia López de Bello), excelente. A todo esto, una cerveza con un buen sándwich es una maravilla.

+D Pascual y su guía

Pascual Ibáñez es un hombre nacido en España y hace rato instalado en Chile con el arte de buen catar. De hecho después de años como sommelier de la revista La CAV, entre varias otras cosas, hoy se desenvuelve por completo en su Escuela de los Sentidos, en la que se pueden catar prácticamente todas las delicias de la vida. Desde habanos a cervezas, y ahí es justo donde me detengo feliz para comentar su Guía de la Cerveza de Chile 2011, que también tuvo una exitosa versión en México. Descúbranla, aprendan y aprovechen que viene con armonías.
En librerías y en www.escueladelossentidos.cl

"La principal novedad es que la cerveza más destacada es Vaguada Costera, Barley Wine, que es un método clásico inglés. Es una microcervecería recién estrenada en San Antonio, Chile. Nosotros catamos casi 300 cervezas y se publicaron 282, y el mayor porcentaje de ellas corresponde a las microcervecerías nacionales, así que toda una constatación de cómo se afiata el rubro. Ésta en particular destaca con aromas a ciruela, finos tostados y algo de café con ese cuerpo vinoso en que la malta pesa. Finaliza con toques de persistente amargor".

"Mi favorita va cambiando a medida que descubro nuevas buenas. La versatilidad de sabores te lleva a una distinta según el momento. Pero después de una larga cata y cuando pruebo estilos muy dispares necesito la potencia de una Stout bien seca, la rica evolución de la desaparecida y deliciosa Strong Ale de los mil días de Szot o una lupulizada Indian Pale Ale, bien hecha como la atípica alemana Eric´s IPA de Camba Bavaria que probé en el último concurso del European Beer Star en Alemania".  Tostados y algo de café con ese cuerpo vinoso en que la malta pesa. Finaliza con toques de persistente amargor".