Corea del Sur impondrá en Seúl las restricciones más drásticas desde el comienzo de la pandemia, anunció este viernes el gobierno, que advierte un aumento del número de casos de coronavirus.

Durante mucho tiempo Corea del Sur fue considerada un modelo en la gestión de la pandemia, debido a la disciplina de la población en el cumplimiento de las consignas de distanciamiento social. Pero la vacunación avanza a un ritmo muy lento por la escasez de dosis.

El viernes el gobierno anunció 1.316 nuevos casos, un récord. La mayoría de estos nuevos contagios fueron en Seúl y sus alrededores, una zona donde vive casi la mitad de la población nacional.

Se detectaron focos de infección en colegios, oficinas, centros comerciales. Según las autoridades sanitarias, los casos son principalmente entre personas de 20 a 40 años, que en su mayoría todavía no pueden optar a la vacunación.

Las nuevas restricciones, que entrarán en vigor el lunes durante dos semanas, prohíben las reuniones de más de dos personas pasadas las 18.00 horas e imponen el cierre de colegios, bares y discotecas.

Las cafeterías y restaurantes no podrán trabajar a plena capacidad y a partir de las 22.00 horas solo se autorizará la venta de comida para llevar.