Siempre se ha comentado que la actriz Jennifer Aniston de 40 años parece de 30, pero el secreto para mantenerse joven aún no ha sido revelado. Sin embargo, la actriz de Friends admitió que ha usado bótox, el milagro científico al cual muchas famosas no pueden resistirse.

Así lo revela el próximo número de la revista Elle, a la que la ex mujer de Brad Pitt concedió una exclusiva, explicando que aunque los resultados son maravillosos, no lo repetiría, pues tuvo algunas molestias. "Lo probé, pero no me fue bien. Sentía como si tuviera un peso en mi cabeza", dijo la actriz.

"Hace que las mujeres parezcan más viejas. Con facciones más duras. El bótox acaba con la calidez en una cara. Ves a algunas mujeres y sabes que no son mayores, pero no sabrías decir qué edad tienen. Eso es lo que me paró", agregó.

Jennifer Aniston alertó que estos tratamientos pueden llegar a hacer adictas a las usuarias, y dice que apoya la opinión de su amiga Courteney Cox quien describe el bótox  como "algo fantástico y horrible a la vez", "un arma de doble filo" al que terminó odiando.

El bótox ha ganado popularidad entre los famosos, sin embargo, pocos son los que han confesado su uso.