De todo el elenco de Jessica Jones, la nueva serie original de Netflix cuya primera temporada ya está disponible en la plataforma de streaming, Carrie-Anne Moss es la que menos presentación necesita. La actriz canadiense posee un amplio currículo, en el que relucen películas como Memento y, cómo no, el personaje que hizo de su rostro y lentes oscuros, parte de la historia del cine de ciencia ficción: Trinity de la trilogía Matrix. Ahora llega al mundo de las series con un papel que, antes de estrenar, ya dio de qué hablar: Jeri Hogarth, una poderosa y autoritaria abogada lesbiana.

La actriz se presentó el pasado sábado 10 de octubre en la Comic Con de Nueva York, junto a sus compañeros de elenco del espacio escrito por Melissa Rosenberg, para dar a conocer algunos detalles de este nuevo rol, el que la hizo acercarse por primera vez al mundo de los superhéroes de Marvel.

En la producción, Moss es la jefa y aliada de la investigadora privada y ex superhéroe Jessica Jones (Krysten Ritter). La actriz de 48 años reconoce que no sabía que en la historia original su personaje es encarnado por un hombre. Y si alguna vez en todo este proceso tuvo algún resquemor por lo que podían llegar a pensar los fanáticos del cómic sobre el cambio de sexo que le dio Netflix para la pantalla chica, en la ComicCon le quedó  claro, con los gritos y aplausos que recibió, que contaba con la aprobación popular.

Moss no oculta la ansiedad que tiene por el estreno de la serie, la que no dejará que sus hijos vean porque en ciertos momentos la historia se vuelve un tanto inquietante, y cada vez que puede destaca el trabajo que hizo Ritter en su papel protagónico. “La que más brilla acá es Krysten. Jessica Jones es un ser humano perfectamente imperfecto, que trata de hacer lo mejor que puede con sus defectos. Siento que además genera muchas relaciones fascinantes con los otros personajes femeninos en la serie, sea el mío o el de Rachel (Taylor)”, dijo a La Tercera.

¿Está preparada para manejar la atención que va a recibir con este rol, que podría repetir lo sucedido con Matrix?

Evito pensar en eso. Desde siempre me ha gustado vivir en mi pequeño mundo y no fijarme en el exterior. Soy un poco ingenua en ese sentido, no me fijo si la gente me anda mirando. Obviamente, este tipo de papeles atrae a muchos fanáticos, pero creo que hay que mantener los pies en la tierra y no volverse loco con esto. He recibido mucha atención en el pasado, pero me he concentrado en seguir haciendo lo mío. He tratado de proteger a mis hijos de esto, pero ya están más grandes y de hecho me quieren acompañar a estas cosas (se ríe).

¿Siente que la televisión le permite crear personajes más profundos que las películas?

Yo creo que es diferente. Lo genial de las películas es que tienes un principio, un medio y un final. Por otro lado, en la televisión desarrollas tu personaje por todo el tiempo que dure la serie. Uno recibe los guiones unas pocas semanas antes de filmarlos, por lo que yo no sabía la historia completa de mi personaje cuando partimos. Creo que depende de cada uno  qué le gusta más. Un ejemplo distinto fue, por ejemplo, Matrix, donde hicimos tres películas, por lo que en la producción pasamos mucho tiempo juntos y formamos una segunda familia, que es lo que pasa con esta serie. Es como un filme que pasas mucho tiempo haciendo.

¿Cuáles cree que son los rasgos más importantes de este rol?

Ella es una mujer muy fuerte, pero también despiadada. Es una abogada que ayuda a Jessica, a cambio que ésta también la ayude a ella. Su relación con ella es complicada. Mi personaje es muy decidida y haría cualquier cosa por conseguir lo que quiere.