Julius Keter (25 años) llegaba al Palacio de La Moneda como uno de los principales favoritos para quedarse con la séptima versión del Maratón de Santiago. El keniata, además de haber ganado en 2011, llegaba con su mejor registro personal, conseguido en el Maratón de Los Angeles en marzo, con un tiempo de 2 horas, 10 minutos y 30 segundos.

"Santiago es una ciudad muy bella y me gusta mucho. Es una gran ciudad para correr", señalaba en perfecto español hace algunos días Keter, quien llegó a la capital desde México, en donde está  radicado, enfocado en su entrenamiento. Sin embargo, ayer, conforme avanzaba la carrera hubo algo que le molestó al atleta africano.

"En los últimos tramos de la carrera se me cruzaron muchos perros, que no me dejaron seguir avanzando con comodidad. Me hicieron perder segundos valiosos", dijo el atleta, luego de llegar a la meta.

Pero no solo con esa frustración llegó Keter, sino que también con un tiempo de 2.11'44'', lo que le permitió romper el récord en la categoría de los 42 kilómetros, que ostentaba desde 2010, el etíope Alene Reta (2.12'33''), sumar su segunda victoria en suelo chileno y extender el predominio de los keniatas en la competencia, que se arrastra desde hace tres años en la categoría masculina.

Usted dijo que venía por la victoria y lo consiguió con un récord. ¿Cuál es el análisis que hace de la carrera?

-Estoy muy emocionado con el triunfo. Me siento contento y orgulloso por mi desempeño.  Sin duda que fue una carrera bastante difícil. Sabía que iban a estar competidores de mucho nivel para este año, como Peter Lemayián y Bado Wourku (2º). La mayoría se preparó durante meses para esta prueba que cada día sube más su nivel y lo demostraron con creces.

Uno de sus objetivos era bajar de los dos horas con 10 minutos, sin embargo no lo pudo conseguir...

-Yo había anunciado que quería batir el récord del maratón a como diera lugar. Por suerte lo logré, pero me faltó bajar los 2'10'', que era mi otro desafío principal. La gran cantidad de perros en la última parte del trayecto dificultaron mi ritmo y bajé un poco la velocidad. Ahí perdí tiempo importante.

En comparación con 2011, en donde también se quedó con el primer lugar, ¿ha visto una evolución en la prueba?

-El nivel del certamen y el nivel de los atletas es altísimo, con mucho mejores tiempos. Me ha sorprendido lo que ha evolucionado el maratón. Es notable. En 2011 no había una competencia tan potente como la que se dio hoy (ayer).

¿Cree que puede seguir creciendo y llegar al nivel de maratones como Nueva York y Los Angeles?

-El maratón ha demostrado ir creciendo año a año y que aún no alcanza su máximo potencial. En 2012 adquirió la categoría de bronce y no me extrañaría que siguiera subiendo, porque tiene todas las características para hacerlo.

A su juicio, ¿cómo se puede lograr aquello?

-Para que el maratón aumente su popularidad a nivel mundial, primero que todo debería entregar mayores premios para los ganadores. De esta manera podrían venir los mejores runnners, de todos los sectores del planeta.

¿Le gustaría volver el año siguiente, batir su propia marca y convertirse en el tricampeón?

-Me encantaría regresar, porque el desafío será mucho mayor. El próximo año quiero romper mi marca y hacer historia en Santiago.

¿Cómo se explica el predominio de su país acá en Chile?

-La verdad es que la clave está en el trabajo y la perseverancia de cada uno, más que en algo colectivo. La diferencia está en la preparación y la mentalidad. Yo tengo un motivo muy fuerte para hacer esto, que afortunadamente es lo que me gusta, que es apoyar a mi familia. Es un tema fuerte para mí y cada vez que corro lo hago pensando en ellos.