Entre el viernes y sábado de este fin de semana, funcionarios de Gendarmerí­a decomisaron 775 armas cortopunzantes y contundentes, 94 celulares con 23 cargadores, 56 chips de telefonía móvil y 550 litros de licor artesanal en allanamientos efectuados en el Centro de Cumplimiento Penitenciario  Colina 2.

Según la información entregada por la institución, en estas diligencias participaron más de 300 efectivos de la Sección de Operaciones Tácticas (SOT), Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios (USEP), Centro Especial de Adiestramiento Canino (CEAC), 150 gendarmes alumnos y personal de Colina 2.

En el operativo, seis internos fueron derivados a la Unidad Especial de Alta Seguridad de Santiago, específicamente al Módulo de Máxima Seguridad, mientras que otros tres fueron trasladados al Complejo Penitenciario de Rancagua, también destinados a módulos de alta seguridad, ya que se trata de reos de alta complejidad delictual y refractarios al sistema.

A raíz de esto, el Director Nacional de Gendarmerí­a, Luis Masferrer señaló que "este procedimiento responde al objetivo que nos hemos trazado desde la Dirección Nacional, de aplicar tolerancia cero a la comisión de delitos dentro de los establecimientos penitenciarios. Con la misma firmeza y convicción con que hemos abordado el tema del hacinamiento y las condiciones de reclusión, lo haremos en materia de seguridad cada vez que corresponda".

A pesar del complejo operativo, Masferrer destacó la rigurosidad y el profesionalismo de los funcionarios que participaron de este procedimiento, lo que se tradujo en que no hubo ningún tipo de resistencia de la población penal.

Tampoco se reportaron casos de internos heridos ni funcionarios lesionados, por lo que  las actividades de rutina de la población penal se desarrollaron con normalidad